Siempre que vemos actos atroces en las noticias, surge la duda de cómo detener a esos seres humanos que actúan inmoralmente en el mundo, pero ¿qué pasa si te digo que con conocer sus rostros y escribir sus nombres en una libreta pequeña podrías desaparecerlos?

Guarda tu dinero porque esto evidentemente es ficción; para ser precisos, se trata de la premisa de un anime que en lo particular vi bastante tarde, pero que me encantó. De antemano, me disculpan todos aquellos que crean que cualquier “comiquita” es para niños, les demostraré que esta historia no es así. Y me disculpan los que les encanta el anime porque con esto no quiero decir que soy un experto, solamente me gustó, lo comparto y recomiendo.

Death Note va mucho más allá que esa simple premisa, porque es una historia donde el bien y el mal debaten del mismo lado pues tienen un mismo objetivo. Pero, además, se ejemplifica cómo el poder puede corromper al ser humano, que aunque sus intenciones sean buenas se presenta el interrogante: ¿sus acciones lo son?

Entre los personajes está Light, el protagonista, que resulta ser un joven narcisista que se encuentra la libreta conocida como Death Note. Debes saber que esta libreta pertenecía a un Shinigami, es decir, un dios de la muerte llamado Ryuk (el cual tiene la particularidad de adorar comer manzanas). Y este es un detalle que me encanta, porque hay un guiño con la religión católica y la manzana. Que un demonio le encante comer lo que en la otra religión puede ser considerado como el pecado original me resulta un gran detalle.

Aquí es el inicio en donde nuestro protagonista, Light, se ve de un momento a otro con el poder de limpiar al mundo de lo que él considera escoria humana.

¿Quién juzga al juez?

Siendo una trama caracterizada por lo sombrío y el juego psicológico, la historia desde muy temprano te invita a tomar una posición y apoyar a uno de los personajes. Sin embargo, sin miedo a spoilearte, puedo decirte que no hay compañeros aquí, todos los involucrados jurarán por su vida que hacen lo correcto por el mundo. Queda en tu decisión juzgar quién de los personajes está del lado correcto de la ética y la moral.

Si matas a todos los asesinos, siempre quedará uno vivo: tú

En la trama de Death Note es evidente el cambio progresivo de los personajes y es notable cómo sucede la corrupción del protagonista. En un inicio usa su libreta con poderes para matar a asesinos en serie, abusadores y violadores, todo con el fin de purificar la tierra. Sin embargo, al tiempo el poder es tanto que ya no habrá diferencia entre el joven y los asesinos que mata a diario.

Un asesino no llama la atención, pero un asesino de asesinos no pasa desapercibido y aunque es un título bastante paradójico, engloba muy bien en lo que termina convirtiéndose el personaje principal. Aunado a esto, Light decide proclamarse como un Dios para así seguir una vida de falso moralismo para “salvar al mundo” y a sí mismo.

Como todo protagonista necesita su contraparte, ahí es donde aparece L, quien se encarga de investigar las muertes y sospecha de nuestro protagonista. Sin olvidar que es aquí donde el peso psicológico aumenta, ya que la relación de L y Light es una especie de amistad sin confianza, donde uno camina, pero medita el paso del otro y donde se juega una enorme partida de atrápame si puedes.

Conclusiones

No quiero profundizar mucho porque siento que puedo dañar la narrativa y la trama, pero si algún antojo de ver la serie les quedó les comento que es una historia bastante corta de 37 episodios. Además, no estamos hablando de simple dibujos, es entretenida, es animada, pero sobre todo te hace cuestionar dónde está el norte de lo correcto. Por eso pienso que Death Note es un anime para sentarse a ver y disfrutar mientras te preguntas: ¿qué harías con tanto poder?