Para muchos mexicanos es todavía una incógnita saber qué tipo de relación habrá de establecerse entre las dos próximas y muy probables mujeres presidentas de EE. UU. y México, Kamala Harris y Claudia Sheinbaum, vecinas geográficas y coincidentes en un sentido amplio en una visión aperturista y democrático-social del mundo de nuestro tiempo. Por ahora nos ocuparemos solo de las perspectivas que nos plantea el triunfo electoral altamente posible de una de ambas candidatas.

Para su mala fortuna, un desafío inesperado ha aparecido en el horizonte de Donald Trump: la candidatura de una mujer más joven que él, Kamala Harris, mestiza-negra, en parte caribeña y en parte hindú, con una sólida experiencia como fiscal, persecutora de delincuentes del estilo del propio Trump. El desconcierto no ha sido menor y la primera reacción mediática conservadora fue recurrir a los argumentos ideológicos señalando a Harris como una “peligrosa activista”, “radical extremista”, etc.

Pero cabe preguntarse ¿qué representan uno y otra en el esquema político y en la mentalidad del ciudadano común estadounidense de hoy? ¿Y qué representan en el amplio espectro del mundo global? Está más que probado el perfil autoritario, conspirativo y profundamente conservador de Trump, alineado con intereses plutocráticos y con una escandalosa conducta delincuencial. Así, a su lado, Harris parecería una “inocente paloma” de la paz. Pero en política, recordémoslo, los extremos se tocan. ¿O es que puede haber duda de que la competencia está centrada más bien en la manera de gestionar el poder imperial?

Camino a la catástrofe

Como bien se sabe, existe una compleja trama de intereses económicos y políticos predominantes al interior de los Estados Unidos y a nivel global, y esto ocurre en una etapa muy avanzada del capitalismo como culminación de un sistema de organización y producción que ha llegado a ser hegemónico en la moderna historia occidental. Y no solo eso: estamos ante la generalización de fenómenos que con diversas modalidades han ido conformando capitalismos nacionales de Estado y, en lo político, de pretendidas democracias sociales o de regímenes francamente autoritarios.

A veces pareciera que lo que realmente está en juego es ver o saber quién sirve mejor a los intereses de las grandes corporaciones y en particular a las militaristas de la industria bélica, es decir, del lucrativo negocio de las guerras. Y todo ello en el marco de una multiplicación de conflictos que bien pueden llevar a las llamadas “guerras nucleares limitadas” (LNW). Y sin embargo, a pesar de todo, aún sigue habiendo espacios para las negociaciones y los acuerdos transitorios de paz. Es sin duda cada vez más evidente e imperativa la necesidad de cambios mayores, profundos, en la organización y en la gestión de las relaciones internacionales, dentro y fuera del sistema de las Naciones Unidas.

Y aparecen así las preguntas: ¿hacia dónde vamos? ¿qué puede seguir o surgir como alternativa a la autodestrucción de la especie humana a partir de las graves amenazas que se ciernen sobre la tierra? Vistos desde Estados Unidos o la Unión Europea, son pocos los cambios que se avizoran o que cabría esperar. Desde el oriente, China y Rusia, las cosas no van mejor. Y desde el sur, aunque se vislumbran alternativas, su potencial eficacia se ve reducida a casi nada. Estamos hablando desde luego de grandes generalizaciones, más no por ello menos plausibles o acertadas.

Así que entonces podríamos y deberíamos preguntarnos sobre las condiciones o fuerzas políticas que podrían equilibrar la balanza y orientarnos hacia expectativas más optimistas o menos sombrías. Y en efecto, si no entran en juego los factores múltiples y diversos que promueven y luchan por objetivos pacíficos y constructivos, lo que aparece en el horizonte con mayor contundencia es el camino hacia lo que podría llegar a ser una catástrofe económica, política y militar.

La trayectoria de Kamala Harris

En una breve versión biográfica, CNN señala que Kamala Harris es la primera mujer en la historia de Estados Unidos en ocupar el cargo de vicepresidenta. Fue la primera mujer negra y sudasiática estadounidense elegida para un cargo nacional por un partido político importante, cuando Joe Biden la nombró como su compañera de fórmula para las elecciones de 2020. Ahora será la aspirante demócrata, tras el retiro del presidente Joe Bien.

Kamala Harris, de 59 años, ha pasado su carrera rompiendo barreras. En California, fue la primera mujer —y la primera mujer negra— en ocupar el cargo de máxima autoridad policial del estado: fiscal. Fue la primera mujer negra de California en ocupar un puesto en el Senado de Estados Unidos, y la segunda de cualquier estado, después de Carol Moseley Braun, de Illinois. Harris es también la primera persona de ascendencia india en aparecer en una candidatura presidencial.

Uno de los primeros y aún escasos libros sobre la biografía de Harris es el siguiente: Kamala Harris: La historia de la primera mujer vicepresidenta de los Estados Unidos, de Dan Morain, publicado el 18 marzo 2021. Se trata de una biografía llena de detalles. Kamala Harris omitió muchos de ellos en su propia autobiografía. Sin embargo, Dan Morain se ha encargado de llenar muchos de esos espacios en blanco. Entre ellos, según The Wall Street Journal, el hecho de que Kamala Harris es una mujer muy poco convencional y aún así su historia personal representa a la de una mujer común de Estados Unidos.

Kamala Harris creció siendo la hija mayor de una madre soltera, una investigadora con cáncer que emigró de la India a los diecinueve años en busca de una educación mejor, y se separó de su marido, un economista originario de Jamaica, cuando Kamala tenía cinco años. Morain explica la carrera profesional de la ahora vicepresidenta de Estados Unidos, desde sus inicios, cuando trabajó en casos de abusos de menores y homicidios como fiscal de distrito del condado de Alameda, y también la relación que a los veintinueve años mantuvo con Willie Brown, alcalde en aquella época de la ciudad de San Francisco y el hombre más poderoso del estado de California, una relación que duró cinco años y que terminó cambiando por completo la vida de Kamala.

Morain analiza los años en los que Kamala fue también fiscal de distrito de San Francisco, relata sus primeros contactos con el aquel entonces muy poco conocido Barack Obama y detalla a la vez cómo se fue abriendo paso hasta convertirse en senadora de Estados Unidos. Este es un retrato muy fiel de sus valores y sus prioridades, del tipo de personas de las que se rodea, del tipo de problemas en los que se desenvuelve mejor y de los pasos en falso y los riesgos que ha tenido que asumir en su camino a la cima política de su país.

He aquí un resumen sobre la vida y la trayectoria de Kamala Harris (información de Gregory Krieg y Jasmine Wright):

Fecha de nacimiento: 20 de octubre de 1964.
Lugar de nacimiento: Oakland, California.
Nombre de nacimiento: Kamala Devi Harris.
Padre: Donald Harris, profesor de economía.
Madre: Shyamala Gopalan Harris, médica.
Esposo: Douglas Emhoff (2014-presente).
Educación: Universidad de Howard, B. A. (bachelor of arts) ciencias políticas y economía, 1986; Universidad de California, Facultad de Derecho Hastings, J. D. (Juris Doctor), 1989.
Religión: Bautista: Hija de inmigrantes jamaicanos e indios, creció asistiendo a una iglesia bautista negra y a un templo hindú. Su nombre proviene de la palabra sánscrita que significa “flor de loto”.

Cronología de su carrera

1990-1998: Se desempeña como fiscal adjunta del condado de Alameda, California.
1998: Es nombrada fiscal gerente de la Unidad Penal de Carrera de la Fiscalía del Distrito de San Francisco.
2004-2011: Ejerce como la fiscal de distrito de San Francisco.
2009: Publica el libro Smart on Crime: A Career Prosecutor’s Plan to Make Us Safer.
2011-2016: Ejerce como la fiscal general de California.
Del 3 de enero de 2017 al 18 de enero de 2021: Sirve en el Senado de Estados Unidos.
5 de diciembre de 2018: acepta la renuncia de Larry Wallace, un asistente principal, luego de que surgieran acusaciones de acoso desde el momento en que trabajó con ella en el Departamento de Justicia de California.
8 de enero de 2019: publica su libro de memorias, The Truths We Hold: An American Journey y el libro ilustrado Superheroes Are Everywhere.
21 de enero de 2019: anuncia que se postula para la presidencia en un video publicado en las redes sociales, al mismo tiempo que aparece en “Good Morning America”, de ABC.
30 de octubre de 2019: en un memorando dirigido al personal y a sus partidarios, el director de campaña de Harris dice que la campaña recortará personal y gastos para centrarse en la estrategia en Iowa. Despide personal en su sede de Baltimore y despliega personal de Nueva Hampshire, Nevada y California en Iowa.
3 de diciembre de 2019: Kamala Harris pone fin a su campaña presidencial de 2020.
8 de marzo de 2020: Harris respalda a Joe Biden para presidente.
11 de agosto de 2020: Biden nombra a Harris como su compañera de fórmula, convirtiéndola en la primera mujer estadounidense de raza negra y del sur de Asia en postularse para la candidatura presidencial de un partido político importante.
7 de noviembre de 2020: días después de las elecciones del 3 de noviembre, CNN proyecta que Harris será elegida vicepresidenta, convirtiéndola en la primera mujer estadounidense, la primera negra y la primera vicepresidenta de ascendencia del sur de Asia.
20 de enero de 2021: toma juramento como vicepresidenta de Estados Unidos.
28 de mayo de 2021: Harris pronuncia el discurso de graduación en la Academia Naval de los Estados Unidos dirigiéndose a la clase de graduados de 2021. Es la primera mujer en dar un discurso de graduación en la escuela.
19 de noviembre de 2021: Biden transfiere temporalmente el poder a Harris mientras está bajo anestesia para una colonoscopia de rutina. Harris se convierte en la primera mujer con poder presidencial.
26 de abril de 2022: la Casa Blanca anuncia que Harris dio positivo por covid-19. Ella no presenta síntomas. Se aísla y trabaja desde la residencia de la vicepresidencia.
27 de mayo de 2023: se convierte en la primera mujer en pronunciar un discurso de graduación en la ceremonia de graduación de la Academia Militar de EE. UU. en West Point, Nueva York.
14 de marzo de 2024: Kamala Harris visita una clínica de Planned Parenthood en Minnesota, la primera vez desde que hay registro que un presidente o vicepresidente de Estados Unidos en ejercicio visita a un proveedor de servicios de aborto.

Conclusión

Por ahora podríamos concluir que si bien la señora Harris aparece por su relativa novedad y frescura como una incógnita, no por ello podemos ignorar lo que representa en términos de objetivos e ineludibles compromisos político-económicos con las mayores y más poderosas oligarquías del capitalismo mundial. Su comportamento habrá de ser el de una especie de peculiar liderazgo femenino en el mundo contemporáneo: conservadora y progresista, autoritarista y eventual defensora de los derechos humanos y también de los cada vez menos oscuros y más visibles intereses del neoliberalismo global.