Jhonson Tsang es considerado un verdadero maestro en la forja del acero, la cerámica y la porcelana. Combinando técnicas de escultura realistas dentro de un imaginario surrealista, nos acerca con sus obras a la dualidad del ser humano, a las luchas internas y externas.
Nacido en Hong Kong, China, en 1960, el escultor Johnson Tsang, sus obras nos permiten alcanzar temas de reflexión que no tienen límites. Con un fuerte poder emocional y un imaginario surrealista sus obras mezclan una serie de sentidos entre lo desolador y lo desgarrador de los rostros humanos, que convierten a sus obras en piezas únicas, ofreciendo mensajes de denuncia y reflexión.
Lírico y provocativo, sus obras integran dos elementos: "seres humanos" y "objetos", convertidos en temas para su expansión creativa. Los niños, personas encerradas, parejas enamoradas, con expresiones faciales trabajadas hasta el más mínimo detalle. La metamorfosis facial es un rasgo característico de su trabajo.
Una de sus series más emblemáticas es Open Mind. El artista nos invita a alcanzar una sensación de apertura mental. En la serie, la forma en la cual nos presenta el rostro/cabeza humana, no es convencional ya que lo convierte en un escenario para un pensamiento: el pensamiento colectivo. En la serie nos permite la visibilización del mundo de una manera diferente. Rostros sin cuerpos que se estiran y abren de manera fantasiosa traspasando los límites de la realidad. Los elementos metafóricos en las cabezas abiertas de las esculturas son presentados por el artista.
Con extravagantes esculturas de porcelana, con expresiones retorcidas o tranquilas, cada una de sus obras busca evidenciar el conflicto interno de la psique humana, para ello incorpora momentos de emociones el dolor y amor en expansión y el entorno del sujeto.
Más allá de sus numerosas obras con rostros infantiles o caras adultas, Johnson Tsang también lleva la creación de recipientes a otro nivel. Las copas, tazas, botellas, cuencos, vasos cobran vida propia. El artista presenComo en su serie Splash of Wonder (2011), logra congelar el tiempo, creando tensión entre el espacio y el espectador.
Con la premisa de capturar la forma de una salpicadura de líquido de la que emergen otras formas, visible en su serie Splash of Wonder, los rostros emergen de un líquido de acero inoxidable o su obra Coffe Kiss, donde hay dos tasas suspendidas en aire derramando el líquido que forma estos rostros besándose.
Los cuencos y tazas de cerámica denotan la gran creatividad por parte del artista, desde el diseño y pensamiento en donde no pierden su identidad de objeto, como en Rice & Noodles o Bowls of fantasy. En la serie Bowls of Fantasy, Jhonson Tsang parte de la idea primaria del cuenco de porcelana para crear distintas variantes con tintes fantasiosos. Pequeñas figuras de carácter humano emergen del cuenco o se deslizan por el borde, nadan, “salpican” el contenido líquido de cerámica creado por el mismo artista.
Sin dudarlo, Jhonson Tsang ha trazado un estilo particular y ha recibido reconocimiento internacional. Nos invita a una introspección. El reflejo del silencio del entorno, del tiempo en espera, congelado forma parte de su proceso artístico. El artista evita explicar su arte con palabras ya que busca el dejar al espectador que sus propias experiencias fluyan. Sus esculturas, por el momento, se han exhibido en Hong Kong, Taiwán, Corea, España y Suiza y forman parte de museos y colecciones privadas.
En su trabajo artístico, Tsang tiene un total dominio del material y la capacidad de trabajar la forma. A lo largo de su trabajo nos ha demostrado que tiene una capacidad expresiva que no tiene límites. Empuja los límites de la imaginación del espectador utilizando los detalles de la realidad y naturaleza humana para impactar la vista y curiosidad de quienes vemos sus obras. Se centra en los detalles, la construcción y desconstrucción del material que se vuelve líquido y chorreante. Sus esculturas doblegan nuestra mente. Es nuestra conciencia la que trabaja, se concentra y retuerce. ta un trabajo extraordinario entre los materiales y las texturas a través de la imitación de líquidos que se funden con las piezas rígidas creando ilusiones de salpicaduras o derrames.