Los Hermanos de Jesús se mencionan explícitamente en Mateo 13:55-56: «¿No es este el hijo del carpintero, y no es María su madre? ¿No es el hermano de Santiago, José, Simón y Judas, y no viven sus hermanas también aquí entre nosotros? ¿De dónde le viene todo esto?» y en Marcos 6:3.
La madre y los hermanos de Jesús se mencionan; aunque no explícitamente, en los tres evangelios sinópticos: Marcos 3:31-35; Mateo 12:47-50 y Lucas 8:19-21 que textualmente cita:
La madre y los hermanos de Jesús se presentaron donde él estaba, pero no pudieron acercarse a él porque había mucha gente. Alguien avisó a Jesús:
—Tu madre y tus hermanos están ahí fuera, y quieren verte. Él contestó:
—Los que oyen el mensaje de Dios y lo ponen en práctica, esos son mi madre y mis hermanos.
Esos pasajes ponen en serios aprietos y comprometen literalmente el dogma de la virginidad perpetua de María quien se supone fue virgen ante partum, in partu, et post partum. En otras palabras: antes del parto, en el parto, y posterior al parto. Obviamente en referencia a de Jesús de Nazaret.
La doctrina de la Iglesia católica se defiende diciendo que se trata de un problema de semántica lingüística con la etimología de la palabra griega ἀδελφό, «adelphos», cuyo significado es «del mismo útero»; literalmente, «hermano». La defensa de la Iglesia católica es que, el uso que, en el Nuevo Testamento, se le da al significado cristiano y judío de palabra «hermano»: del hebreo אח, «aj»; es más extenso que el significado en griego y se utiliza también en el sentido de «primo» o «sobrino» y en plural.
Pero si eso fuera cierto, ¿por qué Marcos y Mateo fueron tan explícitos y contundentes al citar la genealogía de Jesús. Es más, ¿por qué: Juan 19:25-27; Mateo 27:56 y Marcos 15:40? Hacen una clara diferencia entre las 3 mujeres, aparte de María, la madre de Jesús, que estuvieron presentes y lo acompañaron en su crucifixión. A saber: María Magdalena; María de Cleofás, esposa de Cleofás, hermana de la Virgen María según relata Juan 19:25 y la madre de Santiago el Menor y José; y Salomé (discípula) otra posible hermana de María, madre de Jesús y «la madre de los hijos de Zebedeo» según Mateo 27:56.
Entonces, si asumimos que no hay «problemas de semántica» y que la traducción que se hizo de la Septuaginta o Biblia griega que es la más antigua recopilación en griego koiné de los libros hebreos y arameos del Tanaj o Biblia hebrea y otros libros escritos originalmente en griego son correctos, ¿cuáles serían los hermanos de Jesús de Nazaret? Según Marcos 6:3 los hermanos serían: Santiago, José, Judas y Simón. Pero ¿cuál Santiago, José, Judas y Simón? Los textos cristianos primitivos mencionan ampliamente a Santiago el Justo como «el hermano del Señor» y como «el hermano de Jesús». Antiguos escritores como Hegesipo de inicios del siglo II y Tertuliano de finales del siglo II; así como: Helvidio en el Siglo IV y Bonosio en el siglo V apoyaban en sus escritos la hermandad biológica de Jesús de Nazaret con Santiago el Justo. No obstante, el hecho de que los textos antiguos no se refirieran explícitamente a Santiago como «hijo de María», permitió a las autoridades eclesiásticas el desarrollo de diversas interpretaciones. En contra de esa interpretación, José (hermano de Jesús) es mencionado en Mateo 13:55; Simón (hermano de Jesús) también es mencionado en Mateo 13:55 y Marcos 6:3; y Judas (hermano de Jesús) es identificado tradicionalmente como el autor de la «Epístola de Judas».
Pero, qué tal si hubiera más evidencia, «evidencia física» de que Jesús de Nazaret tuvo hermanos carnales. Peor aún, de que estuvo casado con María Magdalena y de que tuvo un hijo con ella como sugieren los Manuscritos del Mar Muerto o Rollos de Qumrán.
La Tumba de los Diez Osarios en Talpiot Oriental, a cinco kilómetros al sur de la Ciudad Vieja de Jerusalén; es un sepulcro excavado en la roca que fue descubierto en 1980. Como su nombre lo indica, contiene diez osarios, seis de los cuales poseen inscripciones. Cuyos nombres son: Yehshúah B[ar] Yoshef (Jesús, h[ijo] de José); Mariamne he Mara (Mariamne, la señora); Yehudah Bar Yehshúah (Judas, hijo de Jesús); Yosh(e) (José-Josá); Mar(í)ah (María-Marah); Matithyahu (Mateo).
El hallazgo fue publicado por primera vez en el «Catalogue of Jewish Ossuaries in the Collections of the State of Israel» números 701-709, en el año 1994. Dos años después apareció un artículo referido al mismo en el número 29 de Atiqot, la publicación de la Autoridad de Antigüedades de Israel. En 2007 el director de cine James Cameron y el periodista investigador Simcha Jacobovici realizaron un documental sobre esta tumba titulado; «La tumba perdida de Jesús» («The Lost Tomb of Jesus») emitido por la señal Discovery Channel. Al mismo tiempo, Jacobovici y Charles Pellegrino escribieron un libro (presentado junto al film) titulado: «La Tumba de la familia de Jesús». En ambos se defiende la idea de que la Tumba de Talpiot es el sepulcro de Jesús de Nazaret, miembros de su familia y algunas personas mencionadas en el Nuevo Testamento. Estas conclusiones no son aceptadas por la mayor parte de los investigadores especializados. Otros, sin embargo, aceptan en todo o en parte la identificación de esta tumba con la de la familia de Jesús; el debate, con los argumentos presentados por ambas partes puede consultarse en el sitio: «Is the Talpiot Tomb the family tomb of the biblical Jesus?» (Wikipedia).
De mi parte creo que es muy factible que los osarios y los personajes bíblicos cuyos nombres poseen inscripciones, son los históricos y son los reales. Máxime que, según el documental de David Cameron, al final se pidió expresamente a los realizadores, cerrar y sellar la tumba. Evitando así cualquier posterior confirmación y/o futura investigación. ¡Dejo a usted sacar sus propias conclusiones!