Desde finales del reciente mes de marzo, la sala Ríos Reyna del Teatro Teresa Carreño en la capital caraqueña se vistió de azul, blanco y rojo: Los Miserables tomó las tablas y alzó su bandera con más de 30 artistas en escena, la orquestación más grande alrededor del mundo y cerca de 300 soñadores involucrados en toda la producción.
Basada en la novela de Victor Hugo, esta apasionante historia francesa sobre la lucha por la libertad y la justicia, tan pertinente para nuestro presente, es contada a través de la vida de Jean Valjean, un ex convicto que, al inicio de la pieza, comienza a buscar la redención tras cumplir diecinueve años en prisión por haber robado un trozo de pan, mostrando parte de la decadente atmósfera reinante que da pie a que, en cierto momento, un grupo de jóvenes estudiantes se reúnan para luchar por sus ideales en las calles parisinas de principios del siglo XIX.
Un equipo de soñadores
Al igual que en su primera temporada, en esta segunda oportunidad, Claudia Salazar Gómez fue la productora general y ejecutiva; el argentino Mariano Detry, quien ha estado frente a la obra numerosas veces, tanto en Londres como a nivel mundial, repitió en la dirección escénica; y la batuta musical volvió a estar a cargo de la maestra Elisa Vegas.
El elenco fue nuevo en su mayoría, sin embargo, regresaron muchos artistas del estreno de 2019, incluso, con los mismos personajes: Beto Baralt, como Jean Valjean; Gaspar Colón, como Javert; Alejandro Míguez, como Monsieur Thénardier; entre otros. Los acompañaron Gabby Brett, quien, tras interpretar a Éponine en la temporada anterior, encarnó a Fantine en esta ocasión; Oriana Rizza, como Cosette; José David Heredia, como Marius; Alba Paola, como Éponine; Daniel Albornoz, como Enjolras; Rose Ordoñez, como Madame Thénardier; y los niños Amelia Hidalgo, Bianka Sánchez, Nicole Ruiloba, Simona Primera y Mati y Moi, junto a un talentoso ensamble de actores y cantantes.
«Esta es una producción madurada que ha crecido con el pasar de los años, no solo con un elenco que se nota que se ha preparado desde el momento que descubrimos un musical de ese tamaño sino con el reto de superarlo. Este montaje es distinto al de todo el mundo, es la versión de Mariano Detry, más detallada, más grande, más robusta. Los Miserables del 2023 es otro musical, otro nivel porque nos lo tenemos que exigir a nosotros mismos y nuestro entorno lo reclama también», aseguró Claudia Salazar Gómez, directora de Clas Producciones, mediante su departamento de prensa.
Vale resaltar que la obra contó con la presencia de Rachael McCutcheon, diseñadora de iluminación; Gastón Briski, diseñador de sonido; Alejandro Zambrano, ingeniero de sonido; y Feliciano San Román, diseñador de pelucas; todos, pertenecientes a la franquicia internacional con la supervisión y el aval del reconocido productor ejecutivo Cameron Mackintosh, responsable de la ejecución y los derechos de Los Miserables, así como de una infinidad de musicales emblemáticos en West End y Broadway.
Los Miserables con la orquestación más grande del mundo
Una vez más, se presentó con la orquestación más extensa mundialmente, pues su autor musical Claude-Michel Schönberg autorizó, en 2019, que Stephen Metcalf, orquestista y director musical en Londres, escribiera exclusivamente para Venezuela las partituras para 32 instrumentos, dirigidos por Elisa Vegas para deleitar al público con canciones tan famosas como Soñé una vida, Sálvalo, Canta el pueblo su canción, entre otros temas que acompañó con voz, lágrimas y entusiasmo más de un espectador desde su butaca teatral.
10 años de Clas Producciones
Junto con la Embajada de Francia en Venezuela, NVivo, FM Center y Movistar, y en asociación con Cameron Mackintosh, Clas Producciones puso, nuevamente, su sello al garantizar una producción llena de excelencia escénica.
Desde hace una década, esta empresa venezolana productora de espectáculos se ha destacado por la realización de musicales y obras de teatro de alta factura y éxito, contando siempre con un equipo de calidad y talento venezolano.
Dirigida por Claudia Salazar, Clas Producciones ha sido responsable de montajes como La novicia rebelde, Godspell, Casi normal, Menos cincuenta, DISfuncional, Manual para mujeres infames, Piaf, voz y delirio, Amorcondríacos, La vida me sabe a Shakespeare, Hamlet, Sinfonía desordenada y Los Miserables.
Asimismo, Salazar es fundadora del proyecto La Escuela, que forma a artistas integrales en el área del teatro musical, y representante oficial en Venezuela de GO Broadway, empresa que opera programas de formación en Nueva York.
Clas Producciones fue merecedora del premio AVENCRIT (Asociación Venezolana de Críticos de Teatro) en el 2017 por Mejor Producción gracias al musical Piaf, voz y delirio y en el 2020 por Los Miserables; igualmente, fue ganadora del Premio Isaac Chocrón a Mejor Producción 2017 por Piaf, voz y delirio.
Reflexión como espectadora y actriz
Como amante de esta historia y su música, esta autora tuvo el honor de asistir a varias funciones de Los Miserables durante su primera temporada y, además, a un par de la segunda. En ambos años, fue inmensa mi ilusión de espectadora desde que entré al teatro y escuché las notas de la obertura hasta la salida de cada función, llegando, de hecho, a extenderse mi emoción a lo largo de los días posteriores, tanto como para querer regresar en la medida de las posibilidades. No obstante, entre un montaje y el otro, fue evidente el progreso resultante del ensayo y el aprendizaje que da el paso de los años, presentando, esta vez, a un equipo que se superó a sí mismo en todo sentido.
Por sumergirnos en sueños de libertad y justicia al poner su corazón al servicio de la escena, Los Miserables es digno de tener una larga y exitosa temporada que llegue al mayor público de venezolanos que se pueda imaginar. Como actriz, extiendo este deseo con todas mis fuerzas a esa porción del medio artístico nacional que, de igual forma, trabaja sin descanso para sacar a flote sus respectivos sueños escénicos, los cuales también necesitan del apoyo de la audiencia para alzar sus propias banderas «Un día más».