El pintor y dibujante Héctor Xavier nació en Tuxpan Veracruz, México, en 1921. Llega a la Ciudad de México en 1938 con tan sólo 17 años de edad. Empieza a trabajar como vendedor y merolico (vendedor callejero que atrae clientes mediante narraciones), en el centro de la ciudad, y empieza a realizar caricaturas por "treinta centavos en blanco y negro; uno cincuenta las de color".
Posteriormente ingresa en 1945 a la Escuela de Pintura y Escultura La Esmeralda, del Instituto Nacional de Bellas Artes, donde solo permanece tres meses debido a que no estaba de acuerdo con el sistema de enseñanza, y optó por ser autodidacta.
Ese mismo año realiza su primera exposición individual en el Museo de Arte Moderno, hoy Museo del Palacio de Bellas Artes, mostrando una serie de dibujos.
En 1952 junto con los artistas Vlady, Enrique Echeverría y Alberto Gironella, funda la Galería Prisse, en donde, un año más tarde, por primera vez tiene una exposición individual el artista José Luis Cuevas.
Desde 1952 hasta 1955 Héctor Xavier viaja por Europa, el norte de África y Estados Unidos. En París decoró una capilla en Longueil-Annel. Estuvo en el taller litográfico de Gastón Dorfinan, cuyo padre había sido el litógrafo de Toulouse-Lautrec. En su paso por Italia descubre las obras realizadas por Durero, Filippino Lippi y Leonardo da Vinci, entre otros artistas, en la técnica de punta de plata, por lo que se propone investigar sobre dicha técnica y a partir de ese momento comenzó a emplearla. En Portugal expuso en el Palacio Foz de Lisboa. Dos años más tarde expuso en Nueva York; Pasadena y Los Ángeles, California.
Cuando regresó a México realizó la escenografía y vestuario para una de las obras que se representaron en Poesía en Voz Alta, bajo los auspicios de la Dirección de Difusión Cultural de la UNAM.
En 1958 realizó una serie de 24 dibujos de animales trabajados en el Zoológico de Chapultepec, con la antigua técnica de punta de plata. dando lugar al álbum Punta de Plata, publicado por la UNAM en 1961 acompañado por textos de Juan José Arreola.
A mediados de los años sesenta se unió al grupo de artistas denominados Nueva Presencia, como Arnold Belkin, Francisco Icaza y Artemio Sepúlveda. Asimismo, fue invitado por Miguel Sabido, en 1965, a realizar el maquillaje para una obra teatral titulada Voces en el templo.
Más tarde, en 1966, fue invitado a formar parte de la delegación mexicana que se presentaría en la Bienal de Blanco y Negro, en Lugano, Suiza; en 1967, en la XVII Bienal de São Paulo; en 1968 fue parte de la Exposición Solar en el Museo del Palacio de Bellas Artes, y en 1973 participó en la Bienal de Arte Gráfica en el Museo Coltejer de Cali, Colombia.
Fue invitado a formar parte del libro Dibujo en México dedicado a la creación de siete artistas (Gilberto Aceves Navarro, José Luis Cuevas, Pedro Friedeberg, Francisco Icaza, Naranjo, Vlady y Héctor Xavier), acompañado por un texto de Raquel Tibol y publicado por el ILCE, en 1978.
Ilustró numeroso libros, sobre todo de poesía, también revistas y diarios.
Los temas más recurrentes de Héctor Xavier fueron la figura humana, los animales y el retrato. El dibujante siempre se interesó por el movimiento, aspecto que revela en su obra y que trabajó por series. Se realizaba un autorretrato una vez al año.
Falleció en la ciudad de México en 1994.
Fuentes
La información y las imágenes fueron tomados del libro Héctor Xavier: el trazo de la línea y los silencios, de Dabi Xavier y Angélica Abelleyra, de próxima publicación.