Sin entrar dentro de los tópicos de las novelas de ciencia ficción, la novela más conocida de Orson Scott Card, El juego de Ender, nos presenta un mundo futurista en el que la raza humana lucha por sobrevivir al ataque de una peligrosa raza alienígena.
Publicada en 1985, la novela de Card obtuvo los más prestigiosos premios de ciencia ficción: el premio Nébula en 1985 y el premio Hugo en 1986. La obra surgió de un cuento publicado por Orson Scott Card en la revista Analog en 1977, en el que se ofrece una pequeña aproximación a la vida de Ender en la Escuela de Batalla y también incluye pasajes sobre la inestable situación política del mundo. Finalmente la novela profundiza en la vida y formación del joven Ender, elegido desde antes de su nacimiento para enfrentarse a la peligrosa amenaza que suponen los insectores para el futuro de la humanidad.
Andrew ‘Ender’ Wiggin, es un tercer hijo, algo no permitido por las normas sobre natalidad que intentan controlar el exceso de población. Sin embargo, el gobierno dio permiso a la familia Wiggin para engendrar a un tercer vástago ya que los dos primero han demostrado tener potencial pero sin ajustarse a los requerimientos necesarios. Es por eso que durante sus seis primeros años de vida, todo lo que Ender hace es controlado mediante un monitor colocado directamente en su cráneo.
Al cumplir los seis años, Ender es alejado de su familia y enviado a la Escuela de Batalla, una institución militar espacial en la que el chico, pese a su corta edad, tiene que aprender a luchar contra los extraterrestres.
A pesar de estar protagonizado por un niño pequeño, la historia muestra de una manera magnética y fascinante como el mundo se ve obligado a dejar la responsabilidad de la supervivencia de la humanidad a apenas un niño y sus compañeros de escuela. Desde el inicio vemos la presión a la que se somete al protagonista de la novela y cómo Ender es obligado a madurar en cinco años hasta alcanzar la edad adulta con solo once años.
A lo largo de la novela también conocemos a otros personajes sumamente interesantes como son los hermanos del protagonista, Peter y Valentine Wiggin, que son los contrapuntos de Ender y su máximo apoyo. Ender vive con miedo de ser igual que su hermano Peter: belicoso, cruel y que disfruta haciendo daño a los demás. También vemos como su hermana Valentine se convierte en su máximo apoyo y en la única persona que de verdad conoce al pequeño Ender.
Mientras Ender se entrena en la Escuela de Batalla, donde sin que él lo sepa se prepara para un exterminio, sus hermanos se dedican a modificar la opinión pública a través de los foros de redes informáticos con personalidades fingidas: Locke (Peter) y Demóstenes (Valentine). Su principal meta es lograr que los líderes mundiales no pertenecientes al Pacto de Varsovia se den cuenta de los planes expansionistas que tienen los rusos y sus aliados.
La historia de Ender continúa en La voz de los Muertos, una novela con corte más filosófico y adulto que la primera, ya que se plantea, entre otros sentimientos, la culpa y la perspectiva en la que se ven los seres humanos al encontrarse con vida inteligente en el espacio.
Si bien El Juego de Ender es más juvenil y su continuación tiene tintes más adultos, ambas componen unas novelas fantásticas y más que amenas en las que el lector puede no solo adentrarse en un relato de ciencia ficción, sino que se puede replantear cual es la situación de la raza humano en el caso de enfrentarse a otra civilización: ¿sería la destrucción o una manera de contactar con otras formas de vida?