A los 19 años nos introdujo a su música art rock con sus bailes contemporáneos y su voz soprano. Hoy Kate Bush es una de las grandes artistas que impactaron la industria musical y sigue batiendo récords con una canción de casi 40 años.
Hoy en día, el nombre Kate Bush es uno de mucho renombre. Gracias a la aparición de su canción Running Up That Hill (A Deal With God) en la serie de Netflix Stranger Things, la cantante volvió a aparecer en las mentes de los oyentes para una vez más volarles la cabeza con su mítica música.
¿Cómo es que una artista, que viene sacando música desde 1978, sigue rompiendo récords y dejando una enorme marca en el mundo?
Catherine Bush es una cantautora, productora y bailarina inglesa, nacida el 30 de julio de 1958, en Bexleyheath, Kent. Su familia era amante del arte: su madre era una enfermera irlandesa, y bailaba danzas irlandesas. Su padre era un doctor y pianista. Sus hermanos eran poetas e incluso armaban instrumentos.
Empezó a escribir canciones a los 11 años, componiendo en su piano. A sus 16 años fue descubierta por David Gilmour, el mítico guitarrista de la banda de rock progresivo inglesa Pink Floyd, quien financió algunas de sus grabaciones y coproduce junto a Andrew Powell, el álbum debut de la joven, The Kick Inside, lanzado en 1978, cuando Bush solo tenía 19 años.
El disco, caracterizado por su sonido art pop/rock, incluía su single debut (y uno de los más exitosos de la cantante hoy en día) Wuthering Heights, donde relata la historia del libro Cumbres borrascosas de Emily Bronte. A fines de ese año sale su segundo disco Lionheart, que fue grabado en los estudios Super Bear en Francia, y es caracterizado por ser más pop progresivo.
En 1980, Bush saca su tercer álbum Never for Ever. Grabado en Abbey Road, este disco incluye singles exitosos como Babooshka y Army Dreamers, este último siendo un waltz que habla sobre una madre que pierde a su hijo en la guerra. Este álbum fue el primero en incluir sintetizadores y cajas de ritmos, algo innovador para la cantante (y para la época también). Asimismo, el disco fue el primero en llegar al número uno en el Reino Unido, convirtiendo a Kate Bush en la primera mujer británica en lograrlo.
Pero el éxito recién empezaba. Luego de inspirarse en el cantante británico Peter Gabriel (con quien Bush había colaborado en su álbum homónimo), en 1982 es lanzado The Dreaming, el primer álbum producido por la mismísima cantante. Ella logró experimentar con diferentes sonidos, además del sobreuso al Fairlight CMI, el primer sampler digital de la historia. Sus canciones contaban historias inspiradas en eventos históricos, como la Guerra de Vietnam, o el efecto del colonialismo en los australianos indígenas, además de inspirarse en Harry Houdini y en el libro de Stephen King El Resplandor. Considerado su álbum más experimental y el menos comercial, en su momento este no tuvo el mismo éxito que los anteriores. De hecho, aunque este llegó a la posición número 3 del Reino Unido, vendió mucho menos y obtuvo una recepción mixta por parte de los críticos. A pesar de esto, con el paso del tiempo, este álbum tomó más y más relevancia, y actualmente es uno de los más aclamados de Kate Bush (y de los años 80).
La cantante, luego del cansancio y estrés sufrido por la promoción y la creación del álbum, fue a preparar su quinto disco. Esta vez, lo hizo completamente sola; construyó un estudio privado cerca de su casa en Kent, donde estaba rodeada de la tranquila y silenciosa naturaleza. De alguna manera, vuelve a sus raíces, pero de ahí saca algo mucho más renovador para el mundo de la música. Siguió utilizando el sintetizador Fairlight CMI, además de agregarle su instrumento original, el piano. Además, utilizó muchos instrumentos tradicionales irlandeses y mucho layering vocal, donde las voces son duplicadas y procesadas para crear armonías.
Hounds Of Love fue lanzado en septiembre de 1985, dividido en dos discos: Hounds Of Love y The Ninth Wave. El primero es el más pop progresivo; allí es donde se incluyen los singles Cloudbusting, la canción homónima (que incluye un sample de la película La noche del demonio de 1957), y la canción más exitosa de la cantante Running Up That Hill (A Deal With God). Este tema synthpop y new wave fue escrito en una sola noche por Bush, quien también utilizó un LinnDrum en loop y un sample de un cello en un Fairlight. La canción trata sobre la falta de comprensión entre personas, y la cantante se imagina que hace un tratado con Dios donde pueden intercambiar lugares para entenderse. En el video se puede ver a Bush haciendo un baile contemporáneo con la bailarina Misha Hervieu, donde ambas usan hakamas en un cuarto violeta.
La segunda parte del álbum es más poética: en él, Bush habla sobre una mujer perdida en el mar. La cantante nos invita a entrar a la mente de esta persona que se balancea entre la vida y la muerte.
El álbum fue el más exitoso y aclamado de Bush, además de incluir su canción más importante hasta la fecha. Llegó al número uno del Reino Unido, además de llegar al puesto 40 en la lista de Billboard 100. Pero no termina acá. En 2012, un remix de la canción es utilizado en la ceremonia de cierre de los Juegos Olímpicos de Londres, y en 2022, la canción vuelve a entrar al Billboard, pero esta vez en el puesto 3, gracias a su aparición en la serie de Netflix Stranger Things.
Ahora, ¿cómo es que una cantante que viene trabajando hace 45 años sigue teniendo el éxito que tiene? ¿Por qué su impacto es tan grande?
Kate Bush es una artista que ha dejado una marca gigante en la industria. Su música fue innovadora desde el comienzo. Siempre llamó la atención desde un principio. Su voz aguda que a veces puede sonar dulce, mientras otras veces puede pegar unos gritos desgarradores. Su música es suya: ella sabe qué quiere hacer con esta, sabe qué historias quiere contar y cómo. Esto fue algo nuevo en los años 80. Las mujeres comenzaban a tomar más control sobre sus proyectos, decidiendo cómo iban a hacer estos álbumes y cuándo estaban listas para lanzarlo.
El legado de Kate Bush es tan importante que puede llegar a la cima de las listas de Billboard con una canción de casi 40 años. Su música, sin importar los años que lleve con ella, siempre va a ser innovadora y extravagante. Sus bailes y sus letras son algunas de las razones por las que muchos artistas se animaron a ser quienes son hoy en día. Ver a una mujer ser como es, escribiendo y produciendo canciones muy renovadoras y legendarias, es algo que impactó y sigue impactando hoy en día. Cantantes como Charli xcx o Rosalía expresaron su admiración hacia ella, incluso Elton John dijo que era “un poco como el equivalente femenino de Freddie Mercury”.
Kate Bush es una expresión del arte en su forma más poderosa: sus movimientos excéntricos, su voz aguda y melódica, y sus letras auténticas y fascinantes son quienes la convierten en una de las artistas más importantes de la historia. Su capacidad de crear canciones y álbumes conceptuales crearon una nueva manera de crear música y arte, y, al mismo tiempo, abrió las puertas para que otros artistas puedan hacer esto y puedan expresarse con toda la libertad del mundo.