Joven funcionaria de la Acción Educativa en el Exterior, representante de la Lengua y Cultura española en el Consulado español de Ámsterdam (programa ALCE), óptico-optometrista, maestra graduada en varias especialidades y máster en enseñanza ELE (Educación Emocional y Neuroeducación), embajadora de Aulas del Futuro para el Instituto Nacional de Tecnología Educativa del Ministerio de Educación y Formación Profesional español, es miembro de la Junta Directiva de la Asociación Española de Educación Emocional, de la Asociación Española de Científicos Residentes en Países Bajos y de la ONG «La Estela de Ayo». Esperanza Meseguer Navarro cuenta con una amplia experiencia como congresista docente en España y en el exterior. Con ella reflexionamos sobre el momento actual que atraviesa el mundo de la educación y sus desafíos.
¿Cuáles son las amenazas de nuestro sistema educativo actual?
El último informe de la OCDE ha puesto de manifiesto que España es un país equitativo en cuanto a lo que los niños y niñas aprenden, pero inequitativo en cuanto a su progreso y logro en el propio sistema. El alumnado pobre, a igual rendimiento, repite cuatro veces más que el que procede de una familia con recursos. Se trata de la segunda brecha más alta de la OCDE, por lo tanto, una de las amenazas de nuestro sistema es la inequidad, siendo una necesidad la de homogeneizar oportunidades. Esto ocurre porque actualmente existe un 33% de niños y adolescentes en riesgo de exclusión social. Esto significa que una de cada tres familias sufre carencias materiales severas o vive en hogares con baja intensidad de empleo. Por eso, es fundamental entender la educación desde una visión integral, desde un punto de vista social, político, económico y sanitario que permita compensar nuestras desigualdades con un enfoque resiliente, capaz de adaptarse a los cambios.
¿Cómo entiendes la educación?
A menudo hacemos análisis sobre la educación de manera individualista, pero la educación es mucho más. La educación es entender la historia, la cultura, la ciencia, la naturaleza, el arte y la paz como instrumentos de avance político, social y humano. Educarnos para el compromiso, la igualdad, la justicia y la libertad es sin duda, garantía de progreso. Sin embargo, que España supere la barrera de los 4000 suicidios anuales (datos INE) con un aumento del 57% en suicidios infantiles, pone en primer lugar la necesidad de una eficaz gestión emocional de la sociedad, en momentos de incertidumbre como los hasta ahora vividos. Es esta, entonces, la primera amenaza de nuestro sistema educativo.
¿Qué propuestas de mejora pueden considerarse?
Educar para la incertidumbre con estrategias de autorregulación emocional es fundamental para afrontar con éxito un sistema educativo que ahora empieza un poco a mirar hacia dentro. Después de la pandemia vivida, llega a los centros educativos un Programa de Bienestar Emocional procedente del Ministerio que tiene como objetivo favorecer la intervención comunitaria y del profesorado en el campo de la salud mental y desarrollar el bienestar emocional. Un espacio emocional que debe verse ampliado y materializado en las aulas. Por eso, fomentar las diferentes formas de expresión o los 100 lenguajes de la infancia, según Loris Malaguzzi, es el pilar de la educación emocional que permite desarrollar en los seres humanos, recursos para educarnos como seres libres y resilientes emocionalmente.
¿Falta investigación?
Sí, por supuesto. Necesitamos más investigación científica en el campo de la neuroeducación. Más y mejor análisis de nuestras propias prácticas que tengan la finalidad de ser más eficaces y que generen impacto en el aprendizaje de una manera más objetiva de la que lo hacemos hasta ahora. Pero también resulta necesario crear estructuras sólidas de gestión de centros con un liderazgo clave centrado en la persona. Necesitamos líderes cualificados que marquen el cauce de los centros, en función de las peculiaridades de cada área social. Con una visión estratégica que impulse el trabajo de tantos y tantos docentes creativos que tenemos en España. Y, sobre todo, nos sobra burocracia, que termina agotando al docente y diluyendo el entusiasmo por innovar. Según la CEOE, las bajas laborales por enfermedades mentales, incluidas el estrés y la ansiedad, en el sector docente, se han visto incrementadas un 33% habiendo experimentado un 68% una sobrecarga de trabajo. Sin duda, necesitamos más docentes y una ratio menos elevada por aula para ponernos al nivel de otros países. Con mejor formación desde las universidades y mejor gestión de nuestros propios recursos podríamos ofrecer una educación de mejor calidad.
¿Qué opinas sobre el nuevo currículum?
En cuarenta años de democracia, hemos aprobado ocho leyes educativas distintas. Esto es sin duda un caos para el docente que reclama un pacto educativo. Sin embargo, esta es la primera ley que habla en términos reales de inclusión, de igualdad y de la aplicación de un Diseño Universal de Aprendizaje. Algo que pone de manifiesto que el aprendizaje es el que ha de hacerse accesible a todos con el uso de herramientas que lo posibiliten y esto, ante todo, es inclusión. Tenemos una nueva definición del currículum, cosa que sí hacía falta, con un enfoque más competencial, más digital y actualizado a la Agenda 2030 y que apoya las metodologías activas que muchos docentes llevábamos años, ejerciendo a contracorriente. Esto está muy bien porque se han tenido en cuenta las aportaciones de muchos profesionales del sector, pero ahora necesitamos más recursos y mejor gestión de estos.
¿Crees que los centros necesitan más recursos?
Sí, claro. Necesitamos muchos más medios materiales y sobre todo personales, así como de profesionales en diferentes líneas que sumen a este sector y que contribuyan a mejorar y facilitar la individualización del aprendizaje. Pero también es preciso una remodelación de las aulas ya que muchas de ellas tienen todavía el mismo aspecto que las del siglo pasado.
Un espacio bien diseñado, así como la disposición estratégica de recursos, invita al aprendizaje desde la calma, la confianza y la libertad ofreciendo las posibilidades más acordes con el desarrollo cognitivo. Esa debe ser nuestra intervención como docentes, preparar el ambiente que permita que el alumno o la alumna se desarrolle en su máximo potencial. Pero, de nuevo, para esto necesitamos renovar la infraestructura de los centros, así como su mobiliario, y otros muchos recursos tecnológicos y humanos que vayan en la línea de las Future Classroom de las Schoolnet que se fomentan desde la Unión Europea. Estas aulas tienen como fundamento unas metodologías ágiles basadas en la construcción del propio conocimiento mediante la elaboración de productos finales que posibilitan el proceso de aprender desde la investigación cooperativa.
¿Cuál es tu trabajo en Holanda?
Sigo trabajando con familias españolas residentes en Países Bajos, fomentando la lengua y cultura de nuestro país, creando vínculos con nuestra tierra y nuestras costumbres que tanto echamos de menos en el exterior. Se trata de un trabajo de diplomacia blanda que se realiza desde el Programa del Ministerio de Educación y Formación Profesional español (ALCE), con sede en el Consulado español de Ámsterdam. Estas familias suelen tener, en su mayoría, un perfil científico ya que muchas de ellas llegaron a este país en busca de trabajo en el campo de la investigación, por eso desde la Asociación española de Científicos en Holanda vinculada a Raicex (Red de asociaciones de científicos e investigadores en el exterior) trabajamos de forma colaborativa en diferentes líneas de actuación como es la visibilización de referentes femeninos españoles en ciencia o la contribución al nuevo Plan de atracción y retención de talento científico e innovador del Ministerio de Ciencia e Innovación.
¿Tus proyectos más inmediatos?
Pronto saldrá al mercado un libro que recopila gran parte de mis inquietudes; otro en el que colaboro con otros grandes docentes del siglo XXI, así como varios álbumes ilustrados que representan, en forma de narrativa poética ilustrada, aspectos educativos de actualidad. En septiembre tendrá lugar el Primer Congreso de Educación Emocional en Sevilla que organizo con la Asociación Española de Educación Emocional y que esperamos tenga un gran calado en la sociedad y especialmente entre los docentes. En materia de Visión y Aprendizaje, sigo trabajando con la vocalía del Colegio de Ópticos y Optometristas de la Comunidad Valenciana en la elaboración de un Plan Integral de Visión para los centros educativos de España (con el Ministerio de Educación y Formación Profesional) que incluye, entre otras actuaciones, un scaperoom en los colegios de la Comunidad Valenciana. Con el Instituto Nacional de Tecnología Educativa (INTEF) avanzamos en la remodelación y formación de muchos centros de la Región de Murcia en Aulas del Futuro.
Y tu labor humanitaria…
En mi vida personal y profesional nunca he dejado de lado mi labor humanitaria. Llevo muchos años trabajando en cooperación internacional con países como Cuba, Perú y la India.
Actualmente colaboro en Yibuti, a través de la Asociación «La Estela de Ayo» apoyada por el Ministerio de Defensa, en campañas de recogida de material escolar, sanitario, alimentos…y con Senegal apoyando a Gloria Egueras, EduVess y la Cátedra de Neuroeducación de la Universidad de Barcelona en un proyecto muy bonito, «Vess-Neurosene», de transformación educativa del país a través de la neurociencia cognitiva del aprendizaje.
Brillante currículum
Esperanza Meseguer Navarro nace en la ciudad española de Orihuela donde realiza sus estudios primarios y de secundaria. Se gradúa en Óptica y Optometría por la Universidad de Alicante mientras inicia proyectos de cooperación internacional en Cuba, Perú y la India. Pronto comienza sus estudios de Magisterio en la especialidad de Infantil y Primaria, graduándose en tan solo dos cursos con el mejor expediente de su promoción y dos becas, una de ellas de la Diputación de Almería con la que realiza una de sus primeras investigaciones en materia de visión y aprendizaje. Tras obtener plaza como maestra funcionaria en la especialidad de Infantil de la Región de Murcia, comienza a unificar sus dos profesiones, colaborando intensamente en la Vocalía de Visión y Aprendizaje del Colegio de Ópticos y Optometristas de la Comunidad Valenciana.
Realiza sus estudios de posgrado en la Universidad Europea de Valencia, en la Universidad de Barcelona y en la Universidad Europea de Madrid. Obtiene la adaptación al Grado con mención en la especialidad de Infantil, Maestrías en Pedagogía Montessori y Educación Emocional, en enseñanza ELE y en Neuroeducación. Es nombrada Embajadora de Aulas del Futuro para el INTEF por su carácter innovador en tecnología educativa y trabaja en transformar la educación con un enfoque innovador de enseñanza del pensamiento computacional en la etapa de infantil y primaria, mediante robótica desenchufada, sentando las bases para la enseñanza del lenguaje de programación por bloques.
Durante el confinamiento publica una app solidaria, para ayudar a gestionar las emociones en los niños y niñas, que tiene una importante repercusión nacional e internacional. Además, es promotora del movimiento «Adopta un Maestro» surgido de la pandemia. Colabora en diferentes medios de comunicación y realiza, entre otros, el programa «Escuela y COVID» en Radio-Sureste y «Creciendo en la escuela» para Radio Orihuela Cadena Ser.
Su capacidad creativa, de innovación, y su compromiso con la sociedad y la educación en general le llevaron a crear el proyecto neuroeducativo llamado «Creciendo de Corazón». Otro gran proyecto que lidera es «Creciendo con el Arcoíris», con un enfoque más centrado en la gestión y Educación Emocional. Colabora en diferentes proyectos con la editorial Edelvives y sigue dando charlas en diferentes Universidades y organizaciones de todo el mundo.
Esperanza Meseguer ha recibido numerosas condecoraciones, premios y reconocimientos, entre ellos Octava Mejor Docente de España por la Especialidad de Infantil (2018) y Mejor Docente de España (EducAbanca 2020). «Murciana del año» por su contribución a la educación en el año de pandemia (La Verdad, 2020), Mujer Importante de la Región de Murcia (La Opinión, 2021), nominada a los premios «Únicas Nueva Condomina» (2022), sellos CCB del Mec Biblioteca San Javier por «Abrazos de Chocolate» (2022) y finalista del concurso Compar-tip (Consejería Educación de Bruselas, 2023), Recientemente, en su ciudad natal, ha obtenido el reconocimiento como Dama de la Real Orden de San Antón.