Pasó enero, donde muchos tuvieron que apretarse el cinturón por los excesos de diciembre y las monedas son un tesoro que ayudan a llegar a fin de mes. Con este estímulo, muchos podemos reflexionar sobre cómo tener más ingresos, cómo hacer para disminuir los gastos. Algunos hemos ido más allá, nos preguntamos sobre las causas de nuestra relación con el dinero y la abundancia. Aquellos que hemos ido más profundo, encontramos patrones, pues, este enero, no fue la excepción.
Con el propósito de contribuir con tu reflexión, les entrego este mes mis apuntes de la conferencia que dio Jorge Llano sobre la abundancia, el 30 de abril de 2022, en su escuela Transformación Humana. Este artículo es la continuación del artículo de noviembre de 2022, Puerta a la abundancia.
En este escrito presento todo lo que él expuso sobre las cuatro leyes de la abundancia y el dinero, cumpliendo así con el compromiso de compartir esa información con siete personas. Espero que sean más las personas que lean este artículo. Las cuatro leyes son: generar, sostener, disfrutar y compartir. Les explico cada una de acuerdo con el taller de Jorge.
Generar abundancia/dinero
Para generar dinero es preciso: observar los patrones; sentirse en dignidad y merecimiento; tener claro para qué se quiere el dinero; observar el lugar que ocupa el dinero en nuestras vidas.
Los patrones del dinero y la abundancia que se han dado en el sistema familiar determinan nuestro comportamiento porque tendemos a reproducir la manera como nuestros ancestros actuaron y reaccionaron frente a este tema. Jorge dice que hay que observar especialmente la relación con la madre porque marca nuestra vibración con la nutrición y la motivación para ir hacia la vida. Asimismo, dijo que hay que traer consciencia sobre lo que cada quien reproduce del sistema familiar. Copiamos a nuestros ancestros y sus maneras de resolver o de no atender los retos/oportunidades que trae la vida.
Si el/la ancestro/a resolvió, se genera un recurso. Si el estímulo/oportunidad/reto fue abrumador y pudo resolverlo, queda latente. Por lo general, frente a estos últimos se genera una marca de culpa, vergüenza o autocastigo. En todo caso se genera un patrón de conducta que pasará de generación a generación, sea por imitación o diferenciación. Hasta que uno de los descendientes, frente a alguno de los retos que se presenten en su vida, pueda trascenderlo. Para identificar el patrón y resolver el obstáculo, resultan muy útiles las constelaciones familiares.
El segundo tema que planteó Jorge: sentirse en dignidad y merecimiento de la abundancia y el dinero. Para esto recomendó subir la energía. Explicó que el dinero y la abundancia vibran en frecuencias altas. Mientras vibremos en otra frecuencia habrá incompatibilidad y por lo tanto no atraeremos el dinero. Señaló que sentirse menos, en carencia o estar en constante queja, hace que vibremos en frecuencias diferentes a las de la abundancia. Entonces es preciso sentirse en plenitud y agradecimiento para atraer la abundancia y el dinero.
El tercer asunto a tener en cuenta para generar abundancia es tener claro para qué se quiere el dinero. Jorge señaló que la energía del dinero y de la abundancia se siente atraída por proyectos que beneficien el colectivo, que tengan una motivación elevada y un sentido psicoespiritual.
Por último, Jorge indicó que para generar abundancia y dinero es necesario ver qué lugar está ocupando el dinero en nuestras vidas. Debe ponerse en un lugar donde nos de soporte. Así como que esté en equilibrio, el dar, el tomar, y el recibir. Esto tiene que ver con que muchas personas ponen el dinero a su lado, como si estuviera ocupando el lugar de pareja; otros lo ponen delante como si fuera la meta última. Es preciso recordar que el lugar del dinero es de vehículo y no de meta.
¿Encontraron algún patrón relevante de su familia sobre el dinero y la abundancia? ¿Cómo se sienten frente a la vida? ¿En agradecimiento o en carencia? ¿Suficiente y en plenitud o carente y sin merecimiento? ¿Cuáles son los hechos de su vida o de su sistema que podría contribuir a que te sientas en culpa, vergüenza o auto castigo?
Sostener abundancia/dinero
¿Has sentido que a pesar de tener buenos ingresos, el dinero se te escurre entre las manos? Jorge dice que en materia de abundancia y dinero, además de generar, se debe sostener. Para eso hay que crear alegría, expresar los dones, hacer lo que nos hace felices.
Jorge dice que hay que tener claro para qué se quiere el dinero que se pide. Para eso se requiere saber el propósito de nuestra vida. Cuando el origen del dinero no está en congruencia con el propósito, ni sirve para expresar los dones, se vuelve una recompensa por el tiempo que cada cual invierte en no cumplir su misión de vida. Jorge dice que el dinero obtenido así es corrupto porque se vende el alma, el tiempo, en algo que no corresponde. Por eso se va rápido. Les puedo decir que esa situación la viví en algunos de mis trabajos previos. Aun cuando en mi rol de abogada la expectativa de salario es alta, el dinero no me duraba, estaba llena de deudas y a veces no alcanzaba a llegar a fin de mes.
Entonces, Jorge dice que hay que preguntarse: ¿Me llena lo que hago? ¿O no me llena lo que hago? ¿Estoy en «trabajos forzados»? Jorge dice que, si se está en un trabajo que no se disfruta, no se puede disfrutar la abundancia que este genera.
Así que para sostener la abundancia hay que manifestar la propia naturaleza. Es decir, activar los dones, recorrer el camino del propósito, florecer en integridad y coherencia con eso. Para ello, corresponde preguntarse cuál es mi misión de vida, mi propósito, a qué vine a este mundo. En relación con esa misión se asignan unos dones y hay que ejercerlos.
Jorge dice que hay varias señales de estar cumpliendo la misión: se da sin esfuerzo, es fácil y el dinero y la abundancia llegan de la misma manera; el universo gratifica y se siente que los dones se extienden. Sintonizarse con la abundancia es dejar de mentirse. Dejar de ser lo que no se es. También, implica dejar de competir y compararse con otros, con los logros de los pares y los ancestros.
Jorge dice que implica también tener claro cuál es la justa medida entre todos los campos de la vida y no dar de más en uno solo. El resultado de todo esto es sentirse en armonía y feliz. Lo que se da de más en un campo, se le quita a otro aspecto. Por ejemplo, si me quedo horas extra en el trabajo y dedico tiempo en el fin de semana a trabajar, ese tiempo extra sale del que se le dedica a la familia, a los hijos, amigos, a descansar o hacer cosas que nutren el alma.
Entonces les pregunto: ¿tienen claridad sobre su propósito de vida, la misión que vinieron a cumplir?; ¿conocen los recursos y dones con los que cuentan para cumplir su propósito? ¿Disfrutan del trabajo que realizan o del servicio que prestan? ¿Se han sentido en «trabajos forzados»? ¿Tienen en equilibrio los aspectos de sus vidas o destinan todo el tiempo a trabajar en función de generar dinero?
Disfrutar la abundancia/dinero
Jorge dice que el dinero es la mano de Dios que nos acaricia. Disfrutar implica tener claro qué es lo que quiero versus cuánto me alcanza tener lo que quiero. Implica registrar las necesidades, las de verdad, las del cuerpo y no las impuestas por el ámbito social y económico en el que crecimos o habitamos. Yo les pregunto ahora: ¿Qué necesitan? La mayoría de nosotros estamos tan desconectados del cuerpo, para no sufrir, que no tenemos ni idea cómo responder esa pregunta. Así, estamos a merced de las modas y las tendencias que imponen lo que se debe o no tener y aspirar.
Jorge explica que una vez conscientes de nuestras necesidades, disfrutar de la abundancia quiere decir que no nos conformemos. Es actuar bajo la confianza de que podemos tener lo que deseamos o lo que es mejor para nosotros. Es aceptar tener lo mejor para cada uno y no conformarse con el premio de consolación.
Él agrega que disfrutar también es encontrar la manera de sacar provecho sin dañar al universo. Es aprovechar la oportunidad. Explica que disfrutar es no hacerse daño ni hacerles daño a otros. Disfrutar crea el flujo. La miseria es la distorsión de la felicidad. Él dice que venimos a esta vida a gastar el corazón amando. Agrega que venimos a disfrutar del parque temático de la tierra y tenemos una pulsera de «todo incluido». Disfrutar es gastar con la confianza de que el dinero va llegar.
Por otro lado, Jorge añadió que las personas abundantes generan, no ahorran. Las personas abundantes despejan el flujo del dinero. Si se tranca se vuelve una dificultad. La abundancia no florece porque estaba vinculada con la creencia de no merecer. Por eso, yo ahora los invito a que sientan que merecen la abundancia y que les paguen por lo que les gusta hacer.
Compartir la abundancia/dinero
Jorge dijo que compartir la prosperidad tiene que ver con dejar un legado. Escribir un libro, escribir un manual. Dejar información y conocimiento para que los nuevos del clan no se pierdan. El recorrido de cada uno genera una experiencia, una sabiduría. Como lo mencioné en el artículo El mito de tu creación. Ese conocimiento actualiza la información que está disponible para toda la humanidad, sobre cómo es la experiencia humana. Para eso has recibido la guía, la inspiración, el apoyo de otros que han venido antes de ti. Para eso, nacieron con unos recursos que te facilitan el cumplimiento de su misión.
Cualquiera que sea su propósito, su campo, compartan lo que saben y han comprendido. Hay muchos como ustedes que necesitan oír y saber que todo va a estar bien, que la ayuda llega, que la idea aterriza y se concreta, que lo que uno cree que está sin solución, se resuelve siempre para bien. Saber que a veces eso que es doloroso, implica soltar ideas viejas y dejar de sostener lealtades con los que más queremos, nuestra familia y amigos.
Jorge agregó que compartir es rezar por otros. Pedir por ellos para que sean abundantes. Para que puedan ver, reconocer, recordar, activar sus recursos. Él dijo que requiere confiar también en que se tiene todo lo que se necesita para resolver la situación y que el premio de eso es la activación de un recurso. Yo creo que el recurso, es lo que se comparte. Jorge expresó que de nada sirve darle limosna a alguien sintiendo que esa persona es inferior o que no puede con lo que se le presenta. En Colombia llamamos eso «pobretear». Eso también es miseria. Es miseria proyectada en otro.
Es mi deseo para ustedes que tengan un año lleno de plenitud y abundancia. Que puedan materializar su propósito. Que puedan generar, sostener, disfrutar y compartir la abundancia y el dinero. Si sienten que este tema está bloqueado, que no ven la luz en este tema, con gusto puedo acompañarlos en este camino.