Reproduce una herrería, con fragua de mampostería y fuelle manual, martillos de bola y machos, bigornia (o yunque, utensilio sobre el que se bate o golpea el hierro blando), espetón (atizador de hierro para el fuego), tenazas, etc.
Colgados en la pared, y como valor testimonial del trabajo de la forja (trabajo sobre algunos materiales calentándolos previamente en la fragua para hacerlos más dóciles), distintos productos realizados en este arte como soportes de faroles, muestras de herrerías de campo… Especialmente significativo para la provincia son los calabozos o rozones, especie de cuchillo de hoja curva utilizado en Málaga para cortar caña de azúcar.
Una lectura especial tienen las rejas, barandillas de balcones y cancelas, recabadas de derribos de viviendas del barrio del Perchel y no sólo por ser ejemplos del trabajo en forja sino porque en su tipología definían la ornamentación de la arquitectura doméstica local de los siglos XVIII y XIX.
Especificidad que se mantiene en la localidad durante el siglo XIX y principios del siglo XX, ya como producto industrial y sinónimo de ese progreso que alcanza la zona gracias a las grandes industrias metalúrgicas, de Heredia principalmente, y queda testimoniado, a nivel decorativo, en los herrajes de las casas de la reconvertida ciudad decimonónica.