La vibración del sonido controlaba mi cuerpo. Cada paso que pensaba estaba limitado por personas que me rodeaban, latas, botellas o vasos. No tenía una imagen visible del lugar, todo se envolvía en luces que iban al compás de la música y el universo estaba completamente sincronizado. No se trataba de estar creando un mundo encerrado en la habitación envuelto por humo. No se trataba de compartir momentos inolvidables con mi imaginación por un cartón que provocaba alucinaciones. No me interesaba inhalar profundo y tener más energía de la que mi cuerpo pudiera soportar. Se trata de poder expandir mi horizonte a lugares donde otras personas compartan el mundo de la misma manera con fin de sentirnos vivos aun sabiendo que tentamos a la muerte.
Las reglas son sabidas, comprar una entrada original en tiendas habilitadas para llegar al lugar y tener el menor cacheo posible al validarse. Nunca tener una mochila. Siempre tener dinero para las ofertas que puede haber dentro. Nunca estar solo aunque se esté con desconocidos, los círculos que pueden formarse siempre dan aire fresco. Guardar dinero para algo de tomar, lo que pueden convidarte es una caja de pandora y el agua en los baños siempre escasea para que uno compre aunque no puedas ni lavarse la cara.
¿Dónde está lo malo en mi estilo de vida? ¿El problema es buscar una alternativa al mundo en que se debe vivir aunque no se esté a gusto con él? Si vivir es levantarse temprano, desayunar siempre lo mismo, cumplir un horario en el trabajo para sobrevivir pensando que el dinero de la jubilación llegará algún día, mientras el tiempo pasa y uno sigue los estándares preestablecidos por algo o alguien de lo que se supone una sociedad civilizada y culta, prefiero investigar en carne propia conceptualmente la muerte, aunque empíricamente tengo solo una vida. Tan solo se trata de eso, tenemos solamente una vida.
Que consuma algún tipo de droga no significa que sea una persona mal educada o sin estudios, no significa que no trabaje o tenga aspiraciones personales, solo significa que es una de las maneras que elegí para vivir mi única vida. Vida que pongo en riesgo todos los días al subirme a un transporte público con exceso de pasajeros y sin conocer a las personas que lo conducen y por qué factores externos a mi conocimiento podría tener un accidente por error humano. Tan solo un error humano puede valer miles de vidas, incluyendo la mía como incluyendo la tuya. Los psicólogos me pueden llamar paranoico, algún psiquiatra quizás esquizofrénico, yo considero que padezco fotofobia por tanta exposición innecesaria en el intento de colocar el cielo en la tierra.
No quiero que me mal interpreten, no apoyo en ninguna medida el uso de drogas ilegales. Pero son ilegales por que alguien o algo dijo que lo eran. ¿Por qué el cigarrillo es legal si también mata? Cada uno es libre de hacer lo que quiera mientras lo que haga no perjudique a otros. Si muero será en el intento de buscar algo que me haga sentir vivo y hasta el momento ningún ser vivo pudo lograr eso. Pero si no muero, quiero vivir en la búsqueda de esa sensación que lleva al cosmos creyendo, quizás inútilmente, que la gente todavía quiere sentir algo.
¿De qué sirve “estar comunicados” si ya apenas se habla?. Solo tipeamos, grabamos en el teléfono un mensaje, nos vemos por la cámara en lugar de salir a tomar un café o arreglar para encontrarnos porque las 24 horas del día no nos alcanzan para acordarnos de nosotros mismos. Ya no hay besos descontrolados en la calle, apenas veo parejas agarradas de las manos, quizás algunas personas mayores tomadas del brazo. Ya los hombres no abren las puertas de las damas o las damas no devuelven una sonrisa sin pensar que son agredidas. Veo muchos ciegos pidiendo limosna pudiendo enfocar la vista, como muchos juzgando la vida de los demás como si los conocieran y lo que pasan en la televisión no es importante para algo realmente. El único que verdaderamente se preocupa por mí soy yo mismo y no quiero vivir preocupado por pasar una vida sintiéndome muerto, viviendo en un cementerio o como en esas series en que caminan sin sentidos los zombis buscando carne pero atrás de dinero.
Si alguien puede decirme como conocer nuevas sensaciones de vida sin tener que estar probando drogas que me lo diga, me gustaría saber dónde hay personas que no tengan miedo y se permitan una vez tras otra darse oportunidades después de saber que la estructura del mundo no puede limitarlos en su hipócrita cárcel emocional. No se trata de intentar ser algo que uno no es y menos estar esclavo para poder sobrevivir. Si la tecnología esta tan avanzada, ¿por qué no desterramos el sistema capitalista en lugar de fabricar cada vez más armas de guerra? No se trata de si estas en el norte, en el sur, en el este o el oeste del planisferio, de qué continente vienes o en que continente quieres estar, si tu piel es roja, amarilla o verde o tus ojos tienen dos parpados. Se trata de que todos estamos vivos y solo hay una vida. Me ha pasado de estar de traje con menos dinero en los bolsillos y en el banco que la persona que estaba pidiendo limosna sin que este esclava de ninguna imposición totalitaria completamente ramificada para un pensamiento colectivo homogeneizado y arcaico como el burgués.
Dinero, dinero, dinero. Pagan para nacer, tenemos que pagar para vivir, incluso pagamos o alguien tiene que pagar cuando uno muere. Todo es dinero. ¿Hace cuánto no salis con una mochila a recorrer nuevos horizontes?¿Hay más posibilidades de morir en un avión o en un viaje por un criminal? De cualquiera de las dos formas siempre hay alguien que puede hacer las cosas bien o puede hacer las cosas mal, El ser humano tiene la capacidad para razonar y diferenciar lo bueno y lo malo, es consciente de sus propias acciones. Pero no conozco a ningún ser humano que tenga poder de juzgar sobre la vida ajena a nivel divino.
Si muero, será en la búsqueda de aquello que me haga feliz de por vida, quizás sean las drogas mientras las dosis de amor en el mundo sigan escaseando, sin preocuparme por ser consecuente de mis acciones en un mundo que me ve mal sin ver su mal.