Hablamos de éxito, frente al “boom de la seriéfila”. Transparent arrasa en su segunda temporada. Una serie de Amazon Studios, llamémosla indie, que hubiese sido imposible en la televisión tradicional. Su gran éxito: hacer natural lo que podría llegar a clasificarse como excéntrico.
Jeffrey Tambor da vida a Morton Pfefferman, un profesor de ciencias políticas jubilado que después de esconder su verdadera identidad durante toda su vida decide contarle a sus hijos su transexualidad y les presenta a la nueva Maura Pfefferman.
Sus hijos aceptan la nueva identidad del padre, llamándole “MaPa”. Apodo cariñoso con el que se refieren a él, tras su cambio de género.
Una realidad y vida familiar, sin tapujos, que tras “la salida del armario” del padre sirve para que cada uno de los hijos se atreva a descubrir sus “verdaderos yos”. Un camino de aceptación de sus caóticas y desorientadas vidas, que están apoyadas y respaldadas por la trama principal, la del personaje de Maura. “MaPa” abre la caja de pandora, donde no sólo salen todos sus fantasmas y miedos al exterior, sino también los de sus hijos. Así nada es suficientemente extravagante, ni complejo, porque el padre ha superado todas las excentricidades con creces y los hijos se ven con total libertad para experimentar lo que realmente son y les gusta. Todo siempre bajo un amor familiar que sustenta sus vidas y hace que superen sus confusiones.
El personaje transgénero es totalmente narrativo, pues esconde en sí ya una trama completa, donde se tejen a su alrededor las diferentes subtramas. No sólo con Transparent, sino con otras series y películas que arrasan a nivel internacional: 3 generaciones, La chica danesa, Zoolander 2…
Es una noticia de éxito, que interesa al público, el reconocer públicamente la condición transexual. Es como decir al mundo “dejo de esconderme”, “soy libre”, “no me importa lo que opine el resto”. Como la portada de Vanity Fair con la nueva Caitlyn Jenner, el antes deportista Bruce Jenner. Se ha convertido también en todo un éxito en las redes sociales con más de cinco millones de seguidores en Instagram. La docuserie I am Cait muestra su vida después de su transición.
Otros modelos de éxito por su valentía al reconocer su condición transgénero, como Jazz Jennings. Una adolescente que se reconoció como mujer a los seis años de edad y también se popularizó un documental sobre su transición y lo que supuso para ella y su familia.
Otros ejemplos, como Aydian Dowling. Sale en portada del Men’s Health, revista 100% masculina, exhibiendo sus músculos y su condición de transgénero. ¿Quién se lo habría imaginado?
Podríamos hablar de miles de “éxitos trans”, como las impresionantes modelos Lea T, Andrea Pejic, Valentijh de High, Peche Di -también fundadora de la agencia de modelos Trans Models de New York-; las actrices Laverne Cox y Hari Nef, entre otras; Raffi Freedman-Gurspan, la primera funcionaria abiertamente transexual de la Casa Blanca…
Estas y muchas otras historias de éxito ante una realidad que empieza aceptarse cada vez más gracias a la valentía de las que se atreven a contarlo al mundo. Hablamos del “éxito trans”.