Cuando comienza la serie, conocemos a Sabrina Spellman, de casi 16 años de edad. Es, por una parte, mortal y, por la otra, una bruja que vive en la ciudad de Greendale con sus tías Hilda y Zelda y su primo Ambrose, quien está bajo arresto domiciliario. Sabrina está en una relación romántica y muy seria con su dulce e inocente novio de secundaria, Harvey Kinkle.
La configuración parece lo suficientemente parecida al programa de televisión de los años 90, hasta aproximadamente 10 minutos después del episodio piloto, cuando una escena espantosa te advierte que el programa no se trata de tu amigable bruja del vecindario. Esta nueva Sabrina sabe lo que quiere, quién es y no se deja pisar por nadie.
Casi no se pierde tiempo para que la audiencia sepa que los problemas sociales están en el corazón del espectáculo. Sabrina defiende los derechos de las mujeres, cuestiona el patriarcado y es un espacio general acogedor e inclusivo que incluye personajes no binarios y sexualmente fluidos a la vanguardia. La serie puede ser bastante oscura y macabra en ocasiones, pero es difícil no darse cuenta de que el programa no tiene miedo a tocar temas controvertidos en cada episodio.
La actuación de Kiernan Shipka, quien interpreta a Sabrina, realmente hace que el espectáculo se encienda. Los fanáticos de Mad Men pueden reconocer a Shipka, quien era la hija del inolvidable Don Draper, después de haberla visto crecer y convertirse en una actriz talentosa durante los ocho años que duró el espectáculo. Shipka interpreta a una Sabrina decidida y testaruda que atrae a las mujeres fuertes y no complace a las que la pacifican y es algo que me encanta.
Al igual que con cualquier serie de fantasía, los espectadores disfrutaran el desarrollo de este mundo bastante único y atractivo a la vista. Sabrina se construye en un marco en torno a las reglas de la magia, la historia de la brujería y cómo existen las brujas y los brujos en la actualidad. Además de establecer la historia de fondo de Sabrina Spellman, la vida familiar y las amistades mortales, y cómo se ven afectados por el mundo mágico.
La serie fue creada por Roberto Aguirre-Sacasa, director creativo de Archie Comics y creador de la serie de CW Riverdale. Originalmente, Sabrina estaba en desarrollo en la cadena CW, como compañero de Riverdale. Pero encontró un mejor hogar con Netflix, que permite a la serie presionar todos los botones que normalmente en otras cadenas dicen No presionar en la programación para jóvenes-adultos.
La nueva versión de Sabrina no tiene nada que ver con su antecesora Sabrina, la bruja adolescente en los 90. Esta nueva producción de 10 episodios para su primera temporada eleva la historia de la bruja adolescente. La serie existe en un mundo con graves consecuencias, mayores riesgos y realidades más duras. La brujería no es solo una habilidad caprichosa con la que naciste. Requiere sacrificio y oscuras lealtades que Sabrina debe cuestionar. Te invito a verla y que te dejes hechizar.