De lunes a viernes administrativa y camarera los fines de semana; media jornada de recepcionista por las mañanas y camarera de noche; o guardias como técnico de emergencias con noches de canguro o detrás de una barra de un pub; son sólo ejemplos de compaginación de más de un trabajo, pero que hoy en día es una realidad para más de una persona.
El salario es el que es. En muchas ocasiones –para no decir casi siempre- es bajo y no está en consonancia con el trabajo que se desarrolla, y los gastos son los que son y se deben cubrir- cada uno ha de ser consciente de los que tiene-. Una combinación que, en muchas ocasiones, resulta difícil de equilibrar y la persona se ve obligada a buscar alternativas para cubrir gastos y que la cuenta corriente no quede en números rojos.
Una situación a la que muchas personas se ven forzada y que se les hace cuesta arriba, ya que no siempre se divisa una luz en el final del túnel. La solución no es fácil y sólo con tiempo y empeño, como buscar otro trabajo que permita rebajar el ritmo de trabajo o realizar algún curso o retomar unos estudios, se puede intentar dar la vuelta a la situación. Hasta entonces, tocará ir arriba y abajo, de un lado para otro, sin casi tiempo para uno mismo y cansada.
En otras ocasiones este pluriempleo es buscado, pero con una finalidad: ayudar en los gastos de casa, pagarse los estudios o cubrirse las despesas de los caprichos – un ordenador, coche, móvil, etc.-. En estos casos, la persona sabe y asume la situación que, en numerosas ocasiones, es temporal hasta que pase el motivo que lo motiva; un hecho que permite a la persona afrontar la situación más relajada, que no quiere decir que no vaya cansada.
Dos grupos en que la mayoría de mortales se encuentran en alguna ocasión de su vida; y es que por mucho que uno tenga un salario, este desaparece muy rápido y llenar la cuenta corriente cuesta mucho.
En el otro lado se encuentra las personas que, a pesar de tener un salario y no tener que necesidad de buscar otro empleo, lo buscan. Son personas que necesitan ocuparse el tiempo para mantenerse ocupada. Una situación que la afronta con total tranquilidad y sin preocupaciones; simplemente con ilusión y ganas por estar realizando cosas y mantenerse ocupado tanto físicamente como mentalmente.
Es verdad que en este grupo se puede encontrar el ámbito de voluntariado, y por lo tanto no remunerado, que es por donde se decantan la mayoría de estas personas.
Y tú… ¿eres pluriempleado?