En la noche del domingo 11 de septiembre de 2016, el himno de Colombia sonó con fuerza en las calles de Madrid. Nairo Quintana, ciclista del equipo español Movistar, se coronaba campeón de La Vuelta, logrando así su segunda grande —luego del Giro 2014— al vencer a Christopher Froome por 1 minuto y 23 segundos. De esta manera, el nacido en el departamento de Boyacá —cuna de los grandes ciclistas colombianos— logró poner la bandera tricolor de nuevo en lo más alto de esta competencia, como lo hiciera Lucho Herrera en 1987. La gente en Colombia dejaba de lado las críticas —algo injustas según varios expertos en el deporte— a Quintana por su tercer lugar en el Tour de Francia.
Los más fervientes fanáticos de los ‘escarabajos’, como se le llama a los ciclistas colombianos por sus dotes para la escalada, se dieron por bien servidos con dicho resultado. Aun así, llegaron otras victorias que pusieron a Colombia en la cuarta plaza de la clasificación por naciones de la Unión Ciclística Internacional (UCI). Además dos colombianos, Quintana y Esteban Chaves estuvieron entre los diez mejores ciclistas del mundo en el ranking individual, cuarto y décimo, respectivamente.
Nairo ganó, además de la grande española, otros tres títulos en el 2016: fue campeón de la Vuelta a Cataluña, del Tour de Romandía y de la Ruta del Sur.
El ‘Chavito’, como le llaman a Chaves, tuvo un gran año al ser segundo en el Giro —ganando una etapa— y tercero en La Vuelta —completando cuatro podios colombianos en las grandes en el 2016—; ganó el Giro de Emilia y obtuvo el primer ‘monumento’ para Colombia: el Giro de Lombardía (Monumento se le llama a las cinco carreras de un día más prestigiosas del mundo).
Así como Chaves, otros ‘escarabajos’ lograron ser los primeros colombianos en consagrarse en reconocidas competencias ciclísticas: Fernando Gaviria lo consiguió en la versión 110 de la París-Tours y en la sexta edición del Gran Premio Impanis-Van Petegem, en ambos se transformó en el primer no europeo en ganarlas; Miguel Ángel ‘Supermán’ López ganó la Vuelta a Suiza y la clásica Milán-Turín.
En lo que comprende el calendario World Tour, Colombia fue el que más competencias ganó: Vuelta a Cataluña, Tour de Romandía y Vuelta a España con Nairo, Vuelta a Suiza con Miguel Ángel López y Giro de Lombardía con Esteban Chaves.
Además se le suman las etapas, como las que consiguieron Járlinson Pantano (una en la Vuelta a Suiza y una en el Tour de France) y Darwin Atapuma (una en la Vuelta a Suiza), quien a su vez se vistió de rojo en la Vuelta a España por cuatro días, luego el cedería la prenda a Nairo. Rigoberto Urán, otro ‘escarabajo’, fue tercero en Emilia, Lombardía y en la Milán-Turín.
En el listado final de los 10 corredores latinoamericanos más destacados del 2016 que hizo el diario AS, 8 de ellos son colombianos. El único que no se ha nombrado de dicha lista es Sergio Luis Henao, quien estuvo disputando en los últimos kilómetros las medallas de ruta en los Juegos Olímpicos de Río 2016, pero una caída lo privó a él y a Vincenzo Nibali de lograr algún metal; Henao hizo parte del equipo Sky —el de Froome— que disputó el Tour de Francia este año. Andrey Amador de Costa Rica y Maximiliano Richeze de Argentina, completaron el listado.
Hasta aquí la mirada solo ha sido al ciclismo de ruta, pero otras modalidades también confirmaron que fue el año de la bicicleta: Mariana Pajón se convirtió en doble medallista de oro olímpica en BMX en los juegos de Río de Janeiro, como lo había hecho en las justas anteriores; en hombres, Carlos Ramírez obtuvo un bronce, logrando que Colombia se mantuviera en el podio olímpico como en Londres 2012 con Carlos Oquendo; Fernando Gaviria —sí, el mismo que ganó en ruta— fue campeón mundial en la modalidad de omnium.
Como si faltara la cereza del postre, los artistas Carlos Vives y Shakira lanzaron el tema ‘La bicicleta’, que al igual que los ‘escarabajos’, fue número uno en varios países: Colombia, Estados Unidos, España, Chile, Suiza, México, Ecuador y Venezuela.