La Guaira es la capital del estado Vargas y del Municipio Vargas. Está ubicada en el centro-norte de Venezuela, a tan solo 30 kilómetros de Caracas.
Uno de los lugares más visitados de Venezuela, por su cercanía a Caracas, por su gente amable y cariñosa y por las playas mas cálidas que podrás encontrar en una escapada realizada a este hermoso lugar. Cuenta con una cadena de playas única, vistosa y elegante. Playas para artistas, surfistas, escritores o novelistas. Playas olvidarse de que el mundo existe.
El estado Vargas en Venezuela es uno de los más maravillosos que tiene ese pequeño pero gran país, bordado de punta a punta del pulmón de caracas, llamado Waraira Repano, anteriormente conocido como El parque Nacional el Ávila.
Este estado no solo representa sabrosura y tambor, también un turismo variado y diferentes actividades a disfrutar en familia y con amigos, una de ellas es apreciar los mas bellos atardeceres que ofrece El castillo Negro de La Guaira, ubicado en el antiguo camino de los españoles. Un lugar para no olvidar jamás.
Otra actividad a realizar es recorrer la calle Bolívar de La Guaira, Te sentirás como si estuvieses en un museo al aire libre, ideal para tomar unas hermosas fotografías, por su arquitectura y su historia.
También puedes visitar el Fortín San Carlos, que tiene fecha de construcción en el año 1769. Los propios habitantes de la localidad son los que regulan y programan las visitas al Fortín. Para poder llegar al lugar debes tomar los Jeeps que se encuentran en la calle Trinchera y la Avenida Soublette de La Guaira.
Y una de las actividades de aventura y adrenalina es atreverte a realizar un vuelo de parapente. Varias empresas dedicadas a este rubro te ofrecen un recorrido con vista a las costas venezolanas, haciendo salida desde el Parque Nacional Waraira Repano y aterrizando en la orilla de la playa Los Cocos. Cada vuelo tiene una duración de entre 10 a 20 minutos.
Venezuela esta plagada de lugares fantásticos llenos de diversión y aventura que demuestra que su gente todavía espera su momento, un momento para triunfar y vivir alegremente, dejando las tristezas y amarguras que lamentablemente viven hoy.