Existen ciertos destinos que se asocian solamente con el verano y con los que muchos sueñan cuando el tiempo no es tan agradable o cuando quieren escapar de sus rutinas diarias. En España uno de estos lugares tradicionales es Benidorm, pero poco a poco está demostrando que no solo es un lugar para perderse en el verano.
Otoño cada vez se está convirtiendo en uno de los meses favoritos para las vacaciones y los fines de semana de muchos. Y es que además de encontrar mejores ofertas en alojamiento, por ser meses fuera de la temporada más ocupada, el clima se conserva sorprendentemente agradable.
Mientras en octubre muchos ya se están preocupando y preparando para ir a destinos apropiados para el invierno con nieve y chimeneas, en esta parte de la Costa Blanca todavía se puede sentir un sol agradable y hasta se puede disfrutar de un buen día de playa.
Otra gran ventaja de visitar esta parte del Mediterráneo español en el otoño es que el clima no es tan caliente y agobiante como en el verano, así que bien se puede dar una vuelta por los sitios más turísticos, con el plus de que tampoco hay tanta gente.
Entre los sitios para ver recomiendo los miradores como el Balcón del Mediterráneo, que es una pasarela que se adentra en el mar y desde la que se pueden ver las dos playas de la ciudad: Levante y Poniente. Y, si queda tiempo, se puede ir al alto de la Cruz, que está en una montaña en el norte y desde donde se puede ver todo Benidorm y sus rascacielos.
Y hablando de estos edificios, es apropiado recordar que esta ciudad es la tercera en Europa con mayor concentración de rascacielos, solo detrás de Londres y Milán, así que también es bueno ir a alguno de ellos para subir en ascensor hasta miradores que permiten unas fantásticas vistas.
Para los que quieren hacer actividades en la naturaleza, esta también es la temporada adecuada porque es mucho más agradable ir por la montaña cuando no hace tanto calor. Es recomendado ir a la Sierra Helada, subiendo por donde está el Mirador de la Cruz, y seguir una de las rutas guiadas que llevan incluso a las ciudades cercanas.
Y cuando ya se quieran recuperar fuerza, es posible escoger entre la gran variedad de restaurantes de diversos tipos de comida, nacional e internacional, y lo mejor es que se pueden visitar sin tener que hacer reservas ni filas para esperar. Para luego también ir a tomar alguna copa o hasta disfrutar de los spas que hay en varios de los hoteles y a todos los precios.
En los últimos años, la ciudad de Benidorm también ha sido escogida como el plató para diversas campañas publicitarias y series de televisión, tanto españolas como extranjeras, y estas grabaciones se hacen en temporadas de pocos turistas, así que hasta se puede estar de suerte y encontrarse con una de ellas para vivir una nueva experiencia.