Prats Nogueras Blanchard se complace en presentar When things fall apart, una exposición de Joseph Grigely (1956, Massa chusetts) y Amy Vogel (1967, Washington, D.C.).

When things fall apart es una exposición sobre las cosas que van mal —en nuestros cuerpos, en nuestras vidas, en el mundo.

Gran parte de la exposición gira en torno a la forma en que los cuerpos responden a cambios perturbadores: en el caso de Grigely, una hemorragia ocular que se produjo en el invierno de 2022 y que le ocluyó la visión del ojo derecho. Durante un mes, Grigely hizo acuarelas casi todos los días, documentando lo que podía ver a través de su ojo: una maraña de anillos de luz y oscuridad, de motas, manchas y remolinos. Las acuarelas, que en un principio se hicieron como documentación para su retinó logo, se distinguen ahora como un momento inefable del ser, cuando las palabras no pueden describir los diferentes estados de transformación en los que el cuerpo se remodela a sí mismo.

Para Vogel, el punto de inflexión fue una enfermedad autoinmune que afectó a su movimiento físico, a acciones como caminar y dibujar. Durante las dos últimas décadas, Vogel ha plasmado en su trabajo las transformaciones del mundo natural y nuestra relación con él como una forma de «deshacer». En sus nuevos dibujos de borrado, la naturaleza se enfrenta al dilema de la en tropía y el cambio. La permanencia —tanto de las imágenes como de los cuerpos— se desestabiliza.

Vogel y Grigely llevan más de 25 años trabajando en estrecha colaboración, compartiendo estudio y casa y también proyectos como colaboradores. Para ambos artistas, su trabajo no es tanto «sobre» la discapacidad, sino una encarnación de la discapa cidad y de las formas en que nuestros cuerpos y mentes responden a estados físicos y mentales cambiantes. De este modo, sus obras desafían y reformulan las percepciones tradicionales de lo que es la diversidad funcional, convirtiendo lo que a menudo se considera discapacitante en algo capacitador.

Empezó de forma casi imperceptible, cuando estaba sentado en mi escritorio una tranquila mañana de sábado: Mm fijé, casi de pasada, en un puntito negro en el rabillo del ojo derecho. Pero poco a poco, durante la hora siguiente, el punto se convirtió en una mancha, y la mancha creció y se rompió, arremolinándose y derramándose en mi ojo como si fuera un estuario.

(Joseph Grigely)

De algún modo, estas descripciones verbales me parecían inadecuadas cuando las compartía con los demás: faltaba algo. A pesar de todo el poder y la belleza del lenguaje, me costaba encontrar palabras que describieran las imágenes tan complejas que veía. Al mismo tiempo, vi otra posibilidad: las propias imágenes. Desde el momento en que la mancha negra apareció por el rabillo del ojo hasta el día después de la operación (tres semanas más tarde), hice dibujos y acuarelas de lo que estaba viendo.

(Joseph Grigely)

En los nuevos dibujos borrados de Amy Vogel, la naturaleza se enfrenta al dilema de la entropía y el cambio: ya no somos lo que éramos. Para Vogel, esto se comunica mediante una mancha o una tachadura, un borrón o una superficie restregada o simplemente un espacio negativo, cualquier cosa que socave la resolución o la estabilidad de una imagen.

Realizadas inicialmente como documentación para el retinólogo de Grigely, las acuarelas se distinguen ahora como un momento inefable del ser, cuando las palabras no podían describir los instantes transformadores en que el cuerpo se remodelaba a sí mismo.

No era el único: el pintor noruego Edvard Munch sufrió el mismo tipo de hemorragia en el ojo en 1930. Sin embargo, Munch no se benefició de una solución quirúrgica. [...] Munch había hecho lo mismo que yo: hizo dibujos y acuarelas de lo que veía a través de su ojo. Los llamaba sus dibujos del «ojo enfermo», det syke øyet.

(Joseph Grigely)

“Una exposición que realicé en el Mass MoCA en 2023 incluía obras realizadas entre 1996 y 2023, así como dos esculturas nuevas, una de ellas titulada Between the walls and me. Gran parte de la exposición está dedicada al lado facilitador de la discapacidad, pero también hay una confrontación descarnada y realista con el lado discapacitador de la experiencia. Como persona discapacitada, pasas mucho tiempo defendiéndote: a menudo estás negociando, no sólo el acceso, sino también, como parte del propio proceso, un nivel básico de dignidad. Además, este tipo de defensa no consiste sólo en solicitar adaptaciones, sino también en justificarlas, facilitarlas y guiarlas a través de un proceso que a veces puede ser muy largo. Algunas solicitudes de acceso tardan años en tramitarse, como tardó mi colegio en instalar luces de interpretación en mi clase. Este tipo de defensa es esencialmente un trabajo no remunerado, algo que repito a menudo. Para muchas personas discapacitadas, equivale literalmente a un segundo trabajo. Es estresante. Es agotador. A veces es exasperante.

Between the walls and me es una copia en yeso de mi cabeza, que se estrelló contra la pared de la galería del MoCA, dañando tanto la pared como mi cabeza. Está tirada en el suelo, con la nariz, la barbilla y las orejas rotas y cicatrizadas, y los restos del contacto ensuciando el espacio: los trozos rotos de los dos. No se puede eludir la realidad de esta experiencia. La discapacidad de una persona no se manifiesta únicamente en el presente, como un tipo u otro de deficiencia, sino que es toda la historia de una persona con esa deficiencia y la acumulación de traumas que nunca desaparecen. Utilizo el término ansiedad acumulativa para describir este fenómeno. La ansiedad acumulativa se refiere a la acumulación de experiencias relacionadas con la discapacidad a lo largo de años, o incluso décadas, y a cómo el cuerpo y la mente las asimilan y las transforman en otra cosa, incluso, a veces, si tienes suerte, en arte”.

(Joseph Grigely)

La exposición incluye una nueva publicación de Joseph Grigely, My sick eye drawings, una edición de 1500 ejemplares.

Joseph Grigely nació en Massachusetts in 1956. Grigely es un artista y escritor cuyo trabajo aborda cuestiones sobre la materialización del lenguaje y la comu nicación, así como las formas en que se pueden representar las conversaciones en ausencia del habla. Sordo desde los diez años, su cuerpo de trabajo es fruto de lo que él describe como «observar el mundo con el sonido apagado», y del proceso de coleccionar palabras inscritas, documentos y artefactos creados du rante sus conversaciones con personas que no conocen el lenguaje de signos. Su trabajo atiende al archivo y sus prácticas, y a cómo éste podría activarse con significado formal y narrativo.

Entre sus exposiciones individuales se incluyen Massachusetts Museum of Con temporary Art, North Adams (2023), Serralves Foundation, Oporto (2021), Geor getown University, Washington. D.C. (2021), y The Serpentine, Londres (2017). Entre sus colectivas figuran Kunsthal Nikolaj, Copenhague (2024), Museum of Contemporary Art, San Diego (2024), Frac Normandie Rouen (2021), Stedelijk Museum, Ámsterdam (2021), Bozar, Bruselas (2020), y Luma Foundation, Arles (2020). Su obra forma parte de colecciones como Tate Modern, Londres; Stede lijk, Ámsterdam; Kunsthaus, Zúrich; SMAK, Gante; MoMA y Whitney, en Nueva York. Sus libros incluyen Textualterity: art, theory, and textual criticism (1995), Conversation pieces (1998), Exhibition prosthetics (2010), MacLean 705 (2015), Oceans of love: the uncontainable Gregory Battcock (2016), y Acknowledgments (2024). Su nuevo libro, Otherhow: essays and documents on art and disability, será publicado en 2025 por Primary Information, Nueva York.

Amy Vogel nació en Washington, D.C. en 1967. Su obra aborda la relación hu mana con la naturaleza: cómo intentamos moldearla y remodelarla, y cómo la usamos y abusamos de ella, como parte del proceso de vivir como vivimos, ya sea en contextos urbanos o rurales. En el mundo natural de Vogel siempre hay algo que lo contamina, lo complica, lo ensucia. La artista «pinta», «esculpe» y «hace», pero estos verbos ocultan el hecho de que el proceso implica un reper torio de actividades negadoras: despintar tanto como pintar, desesculpir tanto como esculpir y deshacer como forma de hacer.

Vogel ha realizado exposiciones individuales y proyectos en Paul Kotula Projects, Detroit (2024, 2017, 2008), Air de Paris, París (2017, 2005), y Larissa Goldson, Nueva York (2011, 2008). Entre las exposiciones colectivas se incluyen Tomo rrow, and tomorrow, and tomorrow, Design Museum of Chicago (2022), Women on Paper, Espace de l’Art Concret, Mouans-Sartoux (2018), y The Art of the Lived Experiment, Bluecoat, Liverpool UK (2014). Ella y Joseph Grigely han colaborado durante más de veinte años en una serie de películas, esculturas e instalaciones de audio que se han mostrado en Massachusetts Museum of Contemporary Art, North Adams (2023), Mu.Zee, Ostend, Bélgica (2014), Albright-Knox Art Gallery, Buffalo (2009), Douglas Hyde Gallery, Trinity College, Dublín (2009), y Museum of Contemporary Art, Chicago (2008), Western Front Exhibitions, Vancouver (2006) y Institute Mathildenhöfe, Darmstadt (2006).