Irán es el mejor ejemplo actual de un actor geopolítico aspirando a convertirse en un estado nuclear. Es, junto con Irak, la cuna de las civilizaciones. Tiene 4,000 años de historia y unos 100 millones de habitantes.
Teherán es su capital. Su actual nombre oficial es República Islámica de Irán. Antiguamente se conocía como Persia. Es la capital del mundo islámico chiita y una potencia regional en el oriente medio.
Antes de la revolución islámica de 1979 el país era gobernado por la autocracia del Sah Mohammad Reza Pahleví con el apoyo de los Estados Unidos y el Reino Unido. En esos lejanos tiempos, Washington consideraba a Teherán su principal aliado en la región, pero todo giró radicalmente con la revolución conservadora.
Irán es, desde la revolución islámica encabezada por el ayatola Ruhollah Jomeini, una teocracia o régimen clerical comandado por los ayatolas o sacerdotes. Después de la muerte de Jomeini en 1989, le sucede como jefe de Estado Alí Jamenei.
El 22 de septiembre de 1980 se desata la guerra entre Irán e Irak debido a conflictos fronterizos y diferencias ideológicas y religiosas entre ambas partes. En agosto de 1988, Irán acepta un cese el fuego patrocinado por la Organización de las Naciones Unidas y concluye la confrontación entre los dos grandes vecinos. La guerra entre Teherán y Bagdad termina sin un claro vencedor con un saldo de un millón de muertos y unos dos millones de heridos.
En su sistema rige la ley Sharía. Actualmente su líder supremo es Alí Jamenei. Su actual presidente es el conservador Ebrahim Raisi, quien relevó a Hasan Rohani, considerado como reformista o moderado.
La mayor figura militar era el general Qasem Soleimani, comandante de las Fuerzas Quds, pero fue liquidado el 3 de enero de 2020 en el aeropuerto Internacional de Bagdad en un ataque de precisión orquestado por la administración estadounidense de Donald Trump.
El trato brindado a las mujeres y a las minorías sexuales en Irán es motivo de mucha acusación y controversia en organismos internacionales de derechos humanos y grandes medios de comunicación en occidente.
Teherán sigue el modelo de Corea del Norte tratando de convertirse en un estado nuclear y de esa manera alcanzar la hegemonía del mundo islámico. Tienen cantidades monumentales de petróleo y gas natural. Son la sexta potencia energética del mundo.
Su gran competidor en la región es Arabia Saudita, potencia del islamismo sunnita, aunque recientemente ambos han suscrito un acuerdo de paz con la mediación de China.
Efectivamente, en febrero de 2023, Teherán y Riad han restablecido sus relaciones diplomáticas después de una interrupción que duró siete años. Con lo que el gobierno de Arabia Saudita está enviando la señal a Estados Unidos de que puede encontrar nuevos socios y hacer nuevos negocios con actores de Asia y del Oriente Próximo. Así también Irán evita que Arabia Saudita se acerque demasiado a Israel, su máximo enemigo.
En Siria, el gobierno de Bashar al Assad es salamita y aliado de Teherán. El gobierno de Recep Erdogan en Turquía recientemente reelecto es también cercano a Irán. Actualmente, Irán no tiene relaciones diplomáticas con los Estados Unidos.
Sus enemigos principales son Estados Unidos, al que definen como el «demonio principal» o «gran Satán» y el Estado de Israel al que califican como el «pequeño Satán», utilizando la terminología religiosa de los clérigos radicales. Antes de la caída de la Unión Soviética también se calificaba a Moscú como «el otro Satán». En fin, que prevalece un lenguaje religioso y radical para referirse a sus enemigos políticos.
Siguiendo su ideología salafista Irán tiene como objetivo estratégico «borrar a Israel del mapa». En general, tienen una visión muy crítica de los valores, instituciones y características del mundo occidental. Desde este punto de vista todos los gobiernos occidentales e incluso la mayoría de los gobiernos árabes e islámicos son injustos, excepto, por supuesto el gobierno de Teherán, que sí consideran que es puro y justo.
Irán acaba de ser aceptado como nuevo miembro de los BRICS, junto con Arabia Saudita, Egipto y Argentina.
Su gobierno está focalizado en los mayores centros de inteligencia del mundo que según su criterio serían los Estados Unidos, Reino Unido e Israel con la Mossad.
Teherán apoya financiera y militarmente a Hezbollah en el Líbano y la Yihad Islámica y Hamas en Palestina. Y en América Latina algunos organismos le atribuyen los atentados de AMNIA en Buenos Aires, Argentina.
En la América Latina su presidente Raisi acaba de realizar una gira de visita a sus principales aliados y socios estratégicos y geopolíticos en la región que le llevó a Caracas, Managua y La Habana. El mandatario Raisi se reunió con Nicolás Maduro en Caracas, con Daniel Ortega en Managua y con Miguel Díaz Cannel en la Habana. Irán es ya miembro observador del ALBA.
En la guerra de Ucrania, Irán ha tomado partido a favor de la Rusia de Vladimir Putin, al que apoya no solo políticamente, sino militarmente con el suministro de drones y otras armas para que sean utilizadas contra Ucrania. Es decir que Teherán es actualmente aliado de Rusia.
Por otra parte, Irán ha firmado en 2022 un Acuerdo Estratégico sobre petróleo y otras materias con China que es su principal socio comercial y el presidente de China Xi Jinping ha calificado a Irán «como el principal socio de China en Oriente Medio». Es decir que Irán pasó de ser el principal aliado de los Estados Unidos hasta 1979 a ser ahora el principal aliado de China y de Rusia en el Oriente Próximo.
De manera que las relaciones de la República Islámica de Irán con Rusia y con China son óptimas y la gran cercanía se consolida ahora con el ingreso de Teherán al grupo de los BRICS.
Es conveniente aclarar que Irán es miembro de la Organización de las Naciones Unidas y firmó en 1968 el Tratado de no proliferación nuclear, el cual ratificó en 1970, con lo que se comprometió a no fabricar ni adquirir armas nucleares.
Los Acuerdos sobre el Programa Nuclear de Irán suscritos por cinco miembros del Consejo de Seguridad neutralizan el uso de uranio y plutonio por parte del gobierno de Irán. Y están vigentes sanciones contra el gobierno de Teherán patrocinadas por el gobierno de Washington por su supuesta violación a dichos acuerdos nucleares.
Mientras tanto, ya Irán dispone de misiles balísticos y algunos organismos sospechan que ya está construyendo las primeras armas nucleares.
Desde sus inicios la administración de Joseph Biden en los Estados Unidos anunció que iba a volver al Acuerdo con Irán.
De acuerdo con un informe del Instituto para la Ciencia y la Seguridad Internacional, «Irán no tardaría mucho en construir armas nucleares si decidiera hacerlo». Por su parte el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, «ha advertido que se verá obligado a destruir las instalaciones nucleares de Irán». Y la Organización Internacional de Energía Atómica (OIEA) mantiene un estricto seguimiento sobre las actividades de nucleares de Irán, tratando de evitar que se convierta en el próximo Estado nuclear.
Los Estados nucleares en la actualidad son nueve: Rusia, Estados Unidos, China, Reino Unido, Francia, India, Pakistán, Israel y Corea del Norte. Irán podría convertirse en el décimo Estado nuclear.