El trabajo infantil se refiere al trabajo realizado por menores de edad. La edad permitida para que una persona pueda trabajar es diferente en cada país, por ejemplo en Argentina se puede trabajar a partir de los 18 años y en Estados Unidos la edad mínima para trabajar es de 16 años. Además, también depende de la actividad que se ejecute al trabajar: no es lo mismo que un adolescente de 17 años trabaje de pintor un día puntual o por tiempo determinado, a que si fue explotado toda su vida al trabajar desde muy pequeño en una fábrica. Las dos acciones son negativas, ya que los padres o tutores deben mantener a los menores de edad y no deben permitirles trabajar, ni mucho menos que los exploten.
Sin embargo, se deben tener en cuenta muchos factores para hablar de trabajo infantil: las leyes que rigen en el país en el que vive la persona, la edad, quién es la persona que lo hace trabajar, el tipo de trabajo, la situación del país, la situación familiar, entre otros factores.
El trabajo infantil puede causar daños a la salud, ya sea física o mentalmente. Esta es una de las razones más importantes por las que se debe estar en contra de esta práctica tan común. Algunos derechos que tienen los niños son los siguientes: derecho a la vida, derecho a vivir en buenas condiciones, derecho a vivir sin violencia, derecho a la educación, derecho a la libertad, entre muchos otros. Con el trabajo infantil muchos de estos derechos no se cumplen, o mejor dicho se violan. Muchos de los niños o menores de edad que trabajan no viven en lugares con un ambiente de convivencia sano y en condiciones de salubridad; el trabajo afecta su vida y su salud, generando enfermedades y a veces hasta la muerte. Son maltratados a nivel físico y mental, no acceden a la educación y son privados de su libertad.
Todas las acciones mencionadas anteriormente impiden que el individuo se desarrolle adecuadamente, que no se cumplan sus derechos y su infancia se vea perdida. El trabajo infantil debe ser erradicado y toda acción que atente contra la vida de ellos debe ser denunciada, como por ejemplo: discriminación, trabajo infantil, explotación, violación, entre otras. Como mencionamos anteriormente, siempre se deben cumplir los derechos de cada individuo y no se debe atentar contra estos, por lo tanto, se deben denunciar todo acto perjudicial, por sobre todo en los casos de menores, ya que estos no pueden defenderse por sí mismos.
Todo esto basándonos en las normas internacionales y en los derechos fundamentales, teniendo en cuenta que más de 152 millones de niños trabajan en el mundo, además de eso, 18 mil niños mueren de hambre en el mundo y 102 millones de jóvenes están en condiciones de analfabetismo a nivel mundial. Nos encontramos en una sociedad moderna en la cual todos estos problemas deberían quedar en el pasado y en las nuevas generaciones se debe inculcar los buenos valores y costumbres ciudadanas.