No soy para nada experta en la cocina, pero hace unas semanas volví de viaje y estuve visitando a mi primo que si es experto y me enseñó a hacer un mousse de frutillas que quiero compartir con ustedes.
La maravilla del mousse es que es muy versátil, pueden hacerse salados o dulces, en este caso elegí hacerlo dulce, pero además es un postre ligero y que no empalaga. Fácil y rápido de preparar, perfecto para una cena en casa con amigos o simplemente un postre para después de un almuerzo en casa.
Esta receta es para 4-6 servidas en copas pequeñas o medianas.
Ingredientes
Para preparar el almíbar y merengue italiano
1 clara de huevo
80 g azúcar blanca
20 g agua
Para el coulis de las fresas
100 g de fresas
80 g azúcar blanca
10 g zumo de limón
5 g esencia de vainilla
Para el yogurt o crema de leche
80 g de yogurt griego sin azúcar o crema de leche semi montada
Para la gelatina
¾ de un sobre de gelatina sin sabor
38 g agua
Preparación
Una clave para que el mousse quede bien es cuidar el orden en que se deben incorporar todos los ingredientes, ya que si no se respeta este orden la consistencia, al final, no va a ser la correcta.
Para el merengue hay que poner el azúcar y el agua en una sartén a fuego medio y cocinar hasta que el almíbar esté a punto de bola suave (se comprueba dejando caer una gota de almíbar en agua fría, si es la consistencia deseada, esta debe convertirse en una bolita al fondo del agua).
Simultáneamente a esto batir la clara de huevo a punto de nieve. Luego agregar en forma de chorro el almíbar mientras se bate. Continuar batiendo hasta que la mezcla se enfríe.
Cocinas la fruta con el azúcar en una sartén, luego la procesas, ciernes y agregas el limón y la vainilla (ambos a gusto). Continúas la cocción hasta obtener una especie de coulis (salsa de la fruta pero con una consistencia más gruesa, similar a un sirope). Una vez que este frío el coulis lo incorporas al merengue.
Luego, agregas el yogurt directamente en la mezcla y revolver con una espátula en forma envolvente. En caso de no ser con yogurt puedes utilizar crema de leche. Hay que batir la crema hasta que esté a punto semi montada y luego agregar a la mezcla de igual forma que el yogurt.
Una vez que estén estos pasos listos, se procede a hidratar la gelatina sin sabor en el agua espolvoreándola en forma de lluvia, esperar aproximadamente 5 minutos a que cuaje y luego disolver a baño maría. Agregar la gelatina a la mezcla anterior y revolver bien de forma envolvente.
La receta está en base a un ¾ del sobre de gelatina ya que la idea es que pueda prepararse y servirse en unas 2 horas aproximadamente, pero, si por ejemplo lo preparas en temprano en la tarde para comerlo en la noche es suficiente con medio sobre. El sobre entero se usa solo en caso extremos, o sea si necesitas que sea para servir en 10 minutos de refrigeración y que lo coman ese rato, si no pierde la textura de mousse y se vuelve gelatina y eso no está bien.
Espero que logren hacer este postre sencillo en casa y que lo disfruten.