Conflicto mundial / Indiferencia individualista / Racismo institucionalizado / Determinismo social / Desigualdad de oportunidades / Derechos civiles constantemente amenazados. Tiroteo masivo / Indiferencia individualista / Racismo institucionalizado / Determinismo social / Desigualdad de oportunidades / Amenaza de derechos civiles (...). ¿Cómo se crea el arte en un mundo desconcertado por una profunda división? ¿Se está repitiendo la historia, el futuro ya es viejo? ¿Y puede la visión de la Juventud liberarnos?
Estas son las audaces preguntas abordadas por Robin Kid (alias The Kid) en las obras expuestas – parte de su serie The future is old (2019) y It’s all your fault (2021). Motivadas por el miedo a las crecientes divisiones en nuestro mundo y la esperanza de que el pasado no se convierta en prólogo, estas obras interrogan estructuras de poder, privilegio y democracia.
The future is old
El joven Artista provocador ataca el 'status quo' a través de sus pinturas, esculturas e instalaciones inmersivas. Tomando el “Zeitgeist” de hoy y desglosándolo en pinturas y esculturas desfragmentadas, el Artista busca capturar la repulsión y la necesidad de cambio sentida por su joven generación.
Estas obras expuestas podrían ser más relevantes que nunca, especialmente en nuestros tiempos desafiantes, ya que cuestionan la repetición de la Historia y la posición que la Juventud tomará ahora y en el futuro cercano, inspiradas en las palabras de Coretta Scott King: “La libertad nunca se gana realmente... la ganas en cada generación”.
Igualmente amado por coleccionistas y visitantes de importantes instituciones en todo el mundo, desde Le Grand Palais en París hasta el Museo del Siglo XXI en Chicago, Robin Kid (alias The Kid) es un ciudadano del mundo y una presencia realmente impactante en la evolución de la escena artística contemporánea. Nacido en 1991 y de ascendencia holandesa, Robin Kid (alias The Kid) es un artista contemporáneo neo-Pop multidisciplinario y autodidacta.
Su obra secuestra una variedad de imágenes sociales, políticas y tradicionales del pasado y presente, extrayendo intuitivamente del mundo de la publicidad, internet, la televisión y recuerdos de la infancia. ¿El resultado? Narrativas visuales provocadoras que cuestionan nuestro mundo polarizado del siglo XXI y la delgada frontera entre la inocencia y la corrupción que enfrenta la Juventud de hoy.