Desde finales de la década de 1970 hasta su prematura muerte en 1992 debido a complicaciones relacionadas con el sida, David Wojnarowicz (Nueva Jersey, EE. UU., 1954-Nueva York, EE. UU., 1992) realizó una obra conceptualmente rigurosa y estilísticamente diversa.
Su trayectoria combina una amplia variedad de formas, medios y dispositivos, entre los que se encuentran el uso de la fotografía como herramienta narrativa; el recurso del collage como soporte para la crítica y el posicionamiento político, apoyándose en la pobreza del propio medio; la adopción de la pintura para explorar diferentes procedimientos alegóricos, o el empleo del fotomontaje y el texto con el objeto de abordar las políticas queer y de identidad que marcaron también su papel como activista.
Protagonista decisivo del efervescente entorno social y cultural que fue el East Village de Nueva York en los años ochenta, su trabajo es igualmente testigo del final de esa colectividad artística forjada en décadas anteriores y que se vio definida tanto por la precariedad económica de sus miembros como por su ánimo contestatario, colaborativo y experimental.