Esta exposición pretende evocar, hasta el próximo 24 de noviembre, uno de los espacios más singulares del Museo durante sus dos siglos de historia: El Gabinete de Descanso de sus Majestades.
La sala 39 del edificio Villanueva vuelve a reunir la mayoría de las pinturas que colgaron en ella a partir de 1828 -un total de 44 cuadros-, y la pequeña estancia anexa, que se habilitó como lugar destinado a la higiene personal, ofrece la oportunidad irrepetible de devolver el mueble del retrete, realizado en 1830 por Angel Maeso, a su emplazamiento original. Esta instalación recupera así, en gran medida, uno de los pocos espacios de este tipo que se conservan en los lugares y sitios reales y el único en este museo que puede reconstruirse de forma casi fidedigna.
Además, esta exposición cuenta con recorridos virtuales que se podrán hacer en la misma sala y una experiencia inmersiva de realidad virtual.