La renovación de las exposiciones permanentes del Museo Nacional de Ciencias Naturales (CSIC), iniciada en 2010 con la exposición "Minerales, fósiles y evolución humana" y seguida en 2011 con "El Real Gabinete de Historia Natural", culminó en marzo de 2012 con la inauguración de la exposición permanente "Biodiversidad".
Situada en el ala de Biología del Museo, la muestra ocupa un espacio aproximado de 1.000 metros cuadrados, y ha contado para su realización con la colaboración de más de una docena de científicos del Museo Nacional de Ciencias Naturales, la Fundación Biodiversidad y la Sociedad de Amigos del Museo (SAM). El objetivo de esta exposición es dar a conocer el concepto de biodiversidad y sensibilizar a los visitantes acerca de su importancia y la necesidad de su conservación.
En ella se muestran un gran número de ejemplares procedentes de las colecciones del Museo, algunos de ellos tan emblemáticos como el elefante africano o el diorama de los abejarucos realizado por José María Benedito a principios del siglo XX. Se presentan también ejemplares únicos como el lobo marsupial o el alca gigante, ambos extinguidos, y otros seriamente amenazados como el leopardo de las nieves, el urogallo o el oso pardo.