Sí, usted también debe haberse cruzado con algún cazador de Pokemon por la calle. Son ya una legión, se enorgullecen de sus logros y tienen como misión "evangelizar" a los que aún nos resistimos a salir corriendo detrás de Pikachu. Los que consiguen su propio "gimnasio" son felices como perdices, y ni les cuento los que cazadores que le echan el guante a los legendarios Mewtwo o Dragonite. Sí, tampoco yo sé quiénes son esos. Lo he buscado en Google: "los pokemon más fuertes". Pongan la palabra Pokemon y denle al Google Trends... Van a alucinar.
La red se ha llenado de guías, tutoriales y advenedizos que explican cómo y dónde encontrar a los animalillos de Nintendo. Y ay, Nintendo se está frotando las manos. Tras los últimos años en los que la imagen de la compañía parecía de capa caída, Pokemon Go ha relanzado a la empresa japonesa en menos de dos semanas, hasta el límite de lograr su mayor revaloriación desde que saliese a Bolsa en 1983.
La empresa nipona, que no ha estado involucrada en el desarrollo ni del juego ni de la app, y ni siquiera pone su logo en el invento, se ha capitalizado en más de 13.000 millones de dólares en sus primeros 10 días desde el lanzamiento del juego. Las licencias hacen milagros. Algunas voces consideran ya que Pokemon Go supondrá una revolución en la industria, y otras advierten del peligro de que se cree una burbuja similar a las .com.
Con más de 30 millones de descargas en sus primeras semanas, el smartphone se ha convertido en el mejor aliado de Nintendo en esta nueva fase de la compañía. La estrategia de movilidad y realidad aumentada ha convertido el juego en un auténtico fenómeno social, y la empresa contabiliza ya más de 35 millones de dólares en compras integradas de la aplicación.
Los amantes de Pokemon Go no han tardado en unirse en comunidad. Madrid acogió el pasado día 28 de julio la primera gran quedada de cazadores en España, que reunió en el Parque del Retiro a más de 3.500 personas -con autorización incluida del Ayuntamiento de la capital, autobuses fletados desde toda España y los servidores colapsados-. "Que cazen y recorran de paso la ciudad, que está muy desierta en verano", debió pensar la alcaldesa Carmena.
Y si usted no juega, pero tiene un negocio, sepa que puede crear una 'zona de atracción' cerca de su local para que se acerquen los cazadores. No vaya a ser que sus clientes se quejen de que, aunque su comida está espectacular, no se ve ni un Pokemon en el restaurante. Además, tras largos kilómetros de caza, estos jóvenes -y no tanto- cazadores tendrán que reponer fuerzas...