Nací allá por el año 1968 mientras el mundo se afanaba entre revueltas en Francia y Estados Unidos, luchas en plena primavera de Praga y guerrillas en Vietnam. Pero también entre los acordes del “la la lá” de Massiel, y el “haz el amor y no la guerra” del movimiento hippie y el festival de Woodstock.

Evidentemente me quedé con el “vive la vida”, de modo que desde muy joven intenté disfrutar lo máximo posible haciendo aquéllo que más me gustaba, siempre con un bolígrafo en la mano (ahora un teclado) y un poco más tarde, una maleta en la otra, para intentar dentro de mis medios, conocer el mundo y compartir lo que por él viví.

Nepal, India, Jordania, Argentina, Estados Unidos, Egipto, buena parte de Europa, y dentro de ésta, sobre todo, Bélgica, mi gran pasión y mi segundo hogar nacional de corazón, han sido testigos de mis andanzas.

Y de todo ello he ido escribiendo desde que hace ya 10 años abriera mi primer blog. Al final, ambas pasiones (la de viajar y la de escribir) me dieron pie a que dejara mi tranquilo trabajo de funcionario para profesionalizarme en este particular mundillo del redactor de viajes. Y siempre, con la ilusión del primer día. Aunque continúo viajando por todo el mundo siempre que puedo, mi gran descubrimiento fue Bélgica, cuando aún era un imberbe, más de 20 años atrás. Desde entonces he viajado incontables veces a ese país, y aún hoy, lo hago varias veces al año. Fruto de ese amor a primera vista nació el que hoy es mi santo y seña viajero, http://sobrebelgica.com

Allí encontraréis cuanto necesitéis para viajar a ese país.

Aunque malagueño de nacimiento, estoy afincado en Tenerife desde hace ya 9 años, el lugar perfecto para disfrutar de su magnífica temperatura y de unos paisajes cuando menos espectaculares. A la tierra que me ha acogido le he dedicado el que es mi otro blog personal, http://sobretenerife.com

Fotógrafo, fan del Málaga cf. (y ahora del “Tete” – el Tenerife), ávido lector y aficionado a la Historia, apasionado de los trenes e inquieto por Naturaleza…

Pero ya está bien de hablar de mí. Sinceramente, prefiero y me gustaría que me conocierais por lo que escribo…

¡Os espero!