Desarrollado en colaboración con Casa Gacha, en París, y con el Fundación Jean-Félicien Gacha, Camerún, la exposición presenta 129 piezas textiles que buscan estimular nuevas percepciones sobre África en el público brasileño, desde una perspectiva diversa sobre un continente poblado de conocimientos, tradiciones y aportes artísticos.
Es la primera vez que un conjunto de obras tan importante se muestra al público brasileño, que todavía está muy acostumbrado a asociar los textiles africanos con coloridos estampados producidos industrialmente.
En la exposición los visitantes pueden entrar en contacto con obras que resultan de un conjunto de saberes artesanales ancestrales, piezas cuyo proceso de producción puede tardar semanas, incluso meses.
La exposición nació de la investigación sobre tecnologías textiles ancestrales y la transmisión de conocimientos tradicionales africanos. Los curadores Renato Menezes y Danilo Lovisi visitaron diferentes regiones de Camerún para hablar con líderes y autoridades locales, instituciones y artesanos. Los objetos presentados, en su mayoría procedentes de la colección de la institución franco-camerunense, están elaborados con diferentes materiales y múltiples funciones, y permiten conocer los ritos y cosmogonías de los distintos pueblos africanos.
En la primera habitación, Geometría animal, los visitantes son recibidos por un conjunto excepcional de más de veinte máscaras de elefantes de diferentes tamaños, todas bordadas con cuentas de vidrio multicolores.
En el segundo núcleo, El azul vegetal, se exhiben una variedad de telas teñidas en índigo utilizando diferentes técnicas. En el tercer núcleo, La tecnología del lenguaje, se presenta un diálogo entre los Kente y los oveja, tejido real utilizado entre los Ashanti y Ewe.
El cuarto núcleo, La ruta de las cuentas, presenta un conjunto de piezas textiles y esculturas que tienen en común su uso como soporte para la creación de símbolos con cuentas de vidrio multicolores.
En la sala de al lado, el núcleo Opacidad y transparencia busca crear un diálogo entre un conjunto denominado “terciopelos kassai”, piezas producidas por los Shoowa, pueblo perteneciente a la provincia de Kassai, en la República Democrática del Congo, y velos de seda. Melhfa, producido en Mauritania.
En el sexto núcleo, La danza de las formas, los tejidos instalados en el centro de la sala dan una sensación de coreografía a los distintos tejidos producidos por Kuba. El séptimo núcleo, pinturas de tierra, concluye la ruta presentando un conjunto de tejidos Bògólan, producidos en Mali con una mezcla de barro y hierbas.
(Curada por Renato Menezes y curador invitado Danilo Lovisi)