Aunque ahora puede parecernos algo habitual, el turismo es una práctica más o menos reciente que hunde sus raíces en la Inglaterra de mediados del siglo xviii, cuando ya estaba extendida la idea entre los aristócratas británicos de que, al menos una vez en la vida, había que realizar un gran viaje que los acercara a la cultura clásica europea, recorrido al que llamaban Grand Tour. Era, por supuesto, una travesía reservada a las clases pudientes porque el viaje podía durar desde un par de meses hasta varios años, con largas estancias en ciudades como Calais, París, Bélgica, Florencia, Roma y Nápoles. Durante el viaje practicaban otros idiomas, se relacionaban socialmente y, sobre todo, se familiarizaban con el arte, la cultura y la belleza de los monumentos antiguos.
Además de experiencias y aprendizajes directos, los nobles británicos del llamado Siglo de las Luces adquirieron obras de arte de la antigüedad, en su mayoría provenientes de Italia. Con ellas conformaron colecciones de las que se sirvieron inicialmente para mostrar su poder y prestigio pero que con el tiempo dieron forma a gabinetes para el estudio y luego a los primeros museos modernos, como el Museo Ashmolean de Arte y Arqueología, que abrió sus puertas en 1683, y el Museo Británico, inaugurado en 1795.
La exposición Belleza y virtud. Coleccionismo inglés de arte clásico. Siglo xviii exhibe piezas que fueron reunidas por los jóvenes ingleses en el Grand Tour, conservadas luego por sus descendientes y que hoy forman parte de los acervos de los museos nacionales de Liverpool: World Museum, Walker Art Gallery y Lady Lever Art Gallery, así como Castle Howard y el British Museum. Como complemento a estos acervos nunca antes mostrados en nuestro territorio, incorpora piezas procedentes de la Antigua Academia de San Carlos, el Museo Nacional de las Culturas del Mundo y el Museo Soumaya, para resaltar los valores de la república romana como emblema de los ideales políticos de la Inglaterra de los años 1700.
La exhibición está integrada por cuatro núcleos temáticos: “El Gran Tour”, en el que se abordan los viajes que realizaban los nobles a Italia, donde se familiarizaban con el arte clásico y adquirían algunas obras; “La organización de las colecciones”, que se refiere a las galerías y los catálogos privados; “Modelos de virtud”, que expone cómo la cultura clásica permeó en estructura social e intelectual de Gran Bretaña; y “Sentimiento sobre la razón”, apartado que alude a los últimos años del siglo xviii, cuando se dieron las revoluciones Industrial y Francesa, y aparece la lucha de clases que se vio reflejada en el arte con el romanticismo.