Fue en el otoño de 1936, cuando Pierre Verger (1902–1996) inició en Veracruz la primera de sus visitas a México. Estaba equipado con su cámara Rolleiflex 120 y poseía una carta de presentación escrita por el antropólogo Paul Rivet, la cual “pretendía certificar, ante quien se interesara en saberlo, que tenía la encomienda de realizar fotos de tipo etnográfico”. Tras aquel viaje iniciático, el fotógrafo francés volvió a nuestro país en 1939 y 1957, para retratar las ciudades y la arquitectura, pero en mayor medida las festividades, así como los rostros y la vida rural de un territorio que se transformaba vertiginosamente.
De los más de cinco mil negativos, producto de esos tres recorridos, una selección de 188 imágenes se exhibe en la exposición temporal Pierre Verger en México. Con los pies en la tierra. La exposición cerrará en la Ciudad de México un periplo de dos años, que ha hecho escalas en Guadalajara, Veracruz, Oaxaca y Monterrey. Por tal motivo, en esta ocasión al corpus fotográfico se añade una cuidadosa selección de objetos etnográficos de los acervos del museo: 26 máscaras nahuas, purépechas, mixtecas y zapotecas, así como por un traje mixteco utilizado en la Danza de la Pluma, tradición a la que Verger dedicó un buen número de sus imágenes.
La exhibición se divide en tres núcleos: el primero, denominado “La línea general”, brinda una aproximación a la manera en que Verger comprendió y retrató el paisaje urbano, el patrimonio arqueológico y las ceremonias de la vida rural mexicana. En esta sección se aprecian imágenes como las tituladas: Canoa sobre el río Lerma, en la cual se aprecia a un campesino que surca un paisaje hoy inexistente, o el retrato Juchiteca durante una corrida de toros.
El segundo núcleo, “Días de guardar”, muestra una selección de imágenes —tomadas de los tres citados viajes— que retratan las vestimentas, los simbolismos y las memorias generacionales que subyacen en numerosas danzas indígenas, la mayoría de ellas de carácter religioso. Las fotos de este módulo corresponden, principalmente, al primer viaje de Verger, ya que fue durante los primeros meses de 1937, cuando atado al calendario religioso y agrícola, salió de la Ciudad de México para retratar, a finales de enero, la fiesta patronal de Cuilapam, Guerrero, en honor a Santiago Apóstol.
El último módulo, “Recuerdos de la utopía rural”, recoge mayormente instantáneas y retratos de la tercera visita de Verger a México, ocurrida entre el 9 de julio y el 3 de septiembre de 1957, cuando ya era un antropólogo consolidado y en la que dedicó más tiempo a las imágenes urbanas y el retrato de sus colegas y allegados.
Pierre Verger en México. Con los pies en la tierra se exhibirá a partir del 28 de junio y hasta el 29 de septiembre de 2019 en la Sala A1 del Museo Nacional de Antropología. El acceso es con el boleto de entrada al recinto.