En busca de un muro toma como punto de partida la estancia de José Clemente Orozco en Nueva York, entre las décadas de 1920 y 1930, para acercarse a un momento clave de la historia durante el cual un grupo de artistas e intelectuales se vieron influenciados por corrientes como la teosofía, el ocultismo o el esoterismo.
Durante su viaje, el muralista descubrió y fue parte del Círculo Délfico, una sociedad secreta iniciada por la intelectual Eva Palmer, su esposo Ángelos Sikelianós, y la periodista Alma Reed, que buscaba el resurgimiento de la antigua Grecia y funcionaba como punto de reunión para artistas, arquitectos y escritores —entre los que también se encontraban Claude Bragdon, Anita Brenner y José Juan Tablada, entre otros— que compartían interés en ideologías filosóficas griegas y el movimiento teosófico.
Los artistas y personajes que reúne la exposición estuvieron relacionados, directa o indirectamente, gracias a este peculiar grupo que más tarde devino y dio lugar a espacios expositivos y a la galería conocida como el Delphic Studios. De esta manera, En busca de un muro es un relato sobre la evolución y la trascendencia del movimiento teosófico, el desarrollo de los espacios expositivos y las relaciones públicas de la época, construido a través de un diálogo entre material de archivo, obras de José Clemente Orozco, piezas de la Colección del Museo Tamayo y una obra contemporánea que evoca a la figura de Alma Reed.